El Boletín Oficial del Estado (BOE) ha publicado este sábado las declaraciones de bienes de todos los altos cargos del Gobierno desde 2014. Unas 1.500 declaraciones correspondientes a los ejecutivos de Mariano Rajoy y Pedro Sánchez que recogen la suma de su patrimonio y el importe de sus deudas.
En el documento publicado, de 715 páginas de extensión, se refleja la suma de los bienes de esos altos cargos, el dinero que tienen depositado en cuentas corrientes, o sus acciones en empresas y fondos de inversión. Además, el documento también refleja el importe de sus seguros de vida -en caso de que tengan- y los demás bienes y derechos de contenido económico. Por último, la tabla de cada alto cargo recoge su pasivo, el conjunto de sus deudas.
Por ejemplo, el documento refleja que el patrimonio de Mariano Rajoy durante sus años como presidente del Gobierno se incrementó en 334.940 euros. El valor de lo que declara el exlíder del PP es ahora de 1.606.171,12 euros, frente a los que registró cuando asumió el poder en 2011. Ese año, Rajoy declaró un total de 1.261.230,67 euros. El espacio del pasivo, el conjunto de sus deudas, aparece en blanco.
En el caso del actual jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, posee un patrimonio de 180.794 euros en bienes inmuebles y un pasivo (créditos, préstamos y deudas) por importe de 192.026 euros. En 2014, cuando fue elegido por primera vez secretario general del PSOE, a Sánchez le quedaban por pagar 127.220 de su hipoteca.
Sin detalle de sus bienes y acciones
Esas declaraciones, sin embargo, no especifican la naturaleza de esos bienes ni su desglose. Tampoco permite conocer en qué sociedades tienen acciones o a qué corresponden sus deudas. Se limita únicamente a ofrecer la suma de los diferentes conceptos. En las presentadas por los diputados en el Congreso, por ejemplo, se especifica el número de casas, el nombre de las empresas que se posee o en las que se participa.
Así, por ejemplo, Pedro Duque declara un patrimonio de 1,52 millones de euros, según relativo al ministro de Ciencia, Innovación y Universidades que aparece publicado este sábado en el BOE. Apenas refleja unos bienes inmuebles de 37.620 euros, cuando esta semana hemos sabido que posee una casa en Madrid y un chalet en Alicante. El grueso del patrimonio del astronauta son acciones y participaciones, con un total de 1,18 millones, porque sus casas están a nombre de una sociedad que comparte con su mujer.
En cuanto al resto del gabinete de Pedro Sánchez, destaca por encima del resto Josep Borrell, el titular de la cartera de Exteriores, que declara un patrimonio de 2,77 millones de euros y una deuda de 60.969 euros. La portavoz, Isabel Celáa, es la segunda que más declara con 1,62 millones de euros mientras que debe 152.846,76 euros.
El más rico: un exsecretario de Estado con 50 millones
En la lista de 1.500 altos cargos destaca el patrimonio de Pedro Argüelles, exsecretario de Estado de Defensa con el PP, que declara un total de 49.738.118,74 euros. En el capítulo de deudas incluye la cifra redonda de 20 millones de euros. Argüelles pertenece a una de las familias más ricas de España, cuyo patrimonio ronda los 280 millones de euros.
En la lista de los más ricos entre los altos cargos destacan los embajadores. Entre todos ellos destaca el embajador de España en Corea, Gonzalo Ortiz Díez, declara posesiones por encima de los 25 millones de euros.
En el otro extremo se sitúan los expresidentes del Consejo de la Juventud, Héctor Saz, y Julia Chica. Ambos han entregado la misma declaración de bienes, con todas las casillas en blanco salvo la referente a los depósitos en cuentas bancarias, donde apuntan 600 euros.
Con el objetivo de cumplir la Ley del Alto Cargo, el actual Ministerio de Política Territorial y Función Pública, dirigido por Meritxell Batet, dio a los altos cargos un plazo de tres meses, que se cerró el 26 de septiembre, para presentar la documentación, y que según han confirmado fuentes del Gobierno, todos han presentado.
Las declaraciones de bienes e intereses de los altos cargos no se hacían públicas desde 2014. El Gobierno de Rajoy se fue sin publicar en el BOE el patrimonio del presidente, de sus ministros y altos cargos alegando la necesidad de un reglamento que desarrollase la Ley del Alto Cargo.