El líder del Partido Popular, Pablo Casado, ha empezado este miércoles a hacer campaña en contra de la nueva ley educativa aprobada por el Gobierno en un colegio concertado de Madrid, el San Alfonso, perteneciente a la congregación religiosa de las Hijas de la Caridad. Allí, en una de sus aulas y frente a un crucifijo, Casado ha cargado contra el “adoctrinamiento” en las escuelas y contra una “contrarreforma” que, a su juicio, prima la “ideología”.
Casado ha recalcado que la nueva ley “no es positiva para los alumnos” y por eso ha querido lanzar un “mensaje” a Sánchez: “Aún está a tiempo de que esta contrarreforma no siga su curso y se vuelva a sentar en una mesa, de la que el PSOE se levantó”.
“Dejémonos de excusas, hay una ley en vigor y debemos trabajar para que las leyes educativas no lleven el apellido de ningun ministro y que la comunidad educativa no sean rehenes de la confrontación política. Sentémonos. El pacto educativo no se consigue no contrarreformando”, ha dicho en una comparecencia en la que no ha admitido preguntas.
En “el modelo del PP”, ha añadido Casado, “hay que garantizar la libertad de las familias para elegir la educación de sus hijos. Los hijos sí son de sus padres”.