Un juzgado de Madrid ha condenado al agitador Luis Pérez, más conocido como 'Alvise' en diversas redes sociales, a indemnizar con 60.000 euros por la vía civil al exministro José Luis Ábalos por colgar en Twitter fotos sacadas sin su consentimiento en el jardín de su propia casa. La sentencia considera que el exministro socialista “ha sufrido intromisión ilegítima en sus derechos a la intimidad personal y familiar, a la propia imagen” y que debe ser indemnizado, aunque la sentencia todavía es recurrible. Pérez ha anunciado que llevará este proceso civil ante instancias superiores y ha denunciado que no se le ha notificado correctamente el proceso, mientras que ha pedido aportaciones económicas.
José Luis Ábalos denunció a Luis 'Alvise' Pérez por un tuit difundido en su cuenta de Twitter en enero de 2021, cuando todavía no había sido suspendido por esta red social. Eran dos fotografías en la terraza de su casa ilustradas con el mensaje: “¿Qué opinarías de la salud mental de un Ministro que se pasa toda la tarde mirando fijamente un par de pájaros enjaulados?”. Las imágenes, declara probado el juzgado, fueron utilizadas por el exasesor de Ciudadanos sin el consentimiento del entonces ministro y fueron divulgadas por distintos medios de comunicación.
La magistrada explica que las fotografías “no tienen ningún interés ni relevancia pública”, fueron tomadas “dentro del ámbito más privado” del político y son “ajenas totalmente a su función pública” y son, por tanto, “una intromisión ilegítima en la intimidad del demandante injustificable al estar tomadas en el ámbito estrictamente privado”. Tampoco tiene dudas la magistrada sobre el mensaje que Pérez escribió: “Sugiere que el Sr. Abalos adolece de salud mental por estar mirando o a unos pájaros o plantas o lo que estimase oportuno. Esta frase es sumamente vejatoria al poner en duda no solo su capacidad mental sino su profesionalidad como Ministro de España y por tanto su prestigio y reputación, atentado, por ello contra su fama y honor”.
A la hora de cuantificar en 60.000 euros la indemnización que el exasesor de Ciudadanos debe pagar a Ábalos, explica la jueza que existió “una difusión masiva de estos contenidos” al tener entonces más de 223.000 seguidores en Twitter. Considera la magistrada que “20.000 euros por cada una de las acciones ejercitadas intromisión ilegítima en su honor, intimidad e imagen es una cantidad ponderada”. Se refiere la magistrada tanto al desprestigio de su labor como miembro del Gobierno, como a la difusión masiva en las redes sociales y finalmente también a la difusión en otros medios de comunicación.
De Twitter a Telegram
Luis Pérez, más conocido como 'Alvise' en sus diversos perfiles de internet y apariciones públicas, trabajó para Ciudadanos en la Comunidad Valenciana y como jefe de gabinete el entonces diputado regional Toni Cantó hasta finales de 2019. Desde entonces, y una vez cerrada su cuenta de Twitter en febrero de este año, ha centrado su actividad pública, entre otras cosas, a través de un canal de Telegram donde acumula casi 200.000 suscriptores.
Un canal en el que cuelga bulos, mensajes, vídeos y otros contenidos de manera casi diaria y en el que, entre otras cosas, carga contra la obligatoriedad del uso de las mascarillas o de la vacunación contra el COVID, denunciar lo que considera una “mafia” tanto política como mediática y lanzar consignas ultraderechistas, entre otras cosas, contra la inmigración. En los últimos tiempos también ha dedicado la difusión de su canal a promover una “huelga” contra el ejecutivo de coalición. En los últimos meses también ha difundido audios relacionados con las múltiples ramificaciones del 'caso Villarejo'.
Las fotos de José Luis Ábalos son sólo una pequeña parte de los mensajes que dedica cada cierto tiempo al exministro, acompañados con imágenes o con indicaciones sobre dónde ha pasado supuestamente los últimos días y en compañía de quién. Una práctica que ha extendido a otros políticos o personalidades públicas del espectro progresista, publicando fotografías y detalles de momentos ajenos a sus respectivas actividades públicas.
Pérez también fue imputado por un juzgado de Barcelona por difundir también en Twitter una prueba PCR supuestamente falsa de Salvador Illa. En su canal de Telegram afirma que ese pleito ha sido ganado aunque el fallo todavía no ha sido difundido.