Fuentes parlamentarias han precisado a Europa Press que Dragados (Grupo ACS) ha sido la empresa elegida, en un procedimiento negociado, para hacerse cargo de estas nuevas obras que va a sufrir la sede de la Cámara Baja.
El pasado año ya se sustituyeron las cubiertas del Palacio, un trabajo que también llevó a cabo Dragados y en el que se invirtieron 4,5 millones de euros con cargo a Patrimonio Nacional. Además, se reformaron el hemiciclo y una nueva sala del Palacio, dotándoles de un nuevo sistema de climatización para lo que se desembolsaron unos 706.000 euros, pagados por la institución.
Villalobos ha anunciado que la nueva fase de las obras arrancará en agosto y se prolongará durante unos 15 meses, es decir, cuando esté a punto de concluir la legislatura.
REFUERZOS DE ESTRUCTURA Y CIMIENTOS
Según han concretado la vicepresidenta del Congreso, la arquitecta y la aparejadora de la Cámara los nuevos trabajos se van a centrar en el refuerzo de las estructuras horizontales de la segunda planta del Palacio, que son las originales y datan de mediados del siglo XIX. En concreto, se va a reforzar el forjado de las mismas y se va cambiar el suelo que las cubre.
También es necesario hacer reformas en el segundo sótano del edificio, que se acabó de construir en 1850, sobre un antiguo convento. De hecho, parte de los cimientos del convento se utilizaron para levantar el Palacio de la Carrera de San Jerónimo y también tendrán que ser revisados ahora. Además de reparar la cimentación, para afianzarla y arreglar sus deficiencias actuales, se van a retocar la bajantes de pluviales y de saneamientos.