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El Constitucional aplaza la decisión sobre la libertad de Junqueras por la existencia de “debate interno”

El Tribunal Constitucional está atascado en la resolución de la petición de libertad que ha puesto sobre su mesa el exvicepresidente catalán, Oriol Junqueras. Los magistrados de este órgano llevan tres días reunidos y preocupados fundamentalmente por no desairar al Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH). Ese Tribunal pidió en noviembre a Turquía la puesta en libertad del líder kurdo, Selahattin Demirtas, con argumentos que deberán ser tenidos en consideración para decidir ahora sobre el líder de ERC: “Hay debate interno”, aseguran a eldiario.es fuentes del Tribunal.

La sentencia de Estrasburgo sobre Demirtas señala que su encarcelamiento persiguió “el libre juego del debate político” y en el Constitucional consideran que esa decisión “sienta jurisprudencia” sobre el encarcelamiento preventivo de un líder político en activo.

Según fuentes del tribunal, para resolver el caso se han valorado dos posibilidades: pedir al Supremo una nueva exposición razonada sobre la prisión de Junqueras que incluya la nueva jurisprudencia europea o crear desde el Constitucional “una doctrina nueva” sobre la circunstancia de encarcelar a un político de manera provisional. En el primer caso sería necesario admitir el recurso planteado por Junqueras mientras que, en el segundo, la decisión sería sobre el fondo, por lo que podría ser llevada ante Estrasburgo.

El TC ha aplazado el debate para el próximo 29 de enero, momento en el que volverá a reunirse en pleno. Según las fuentes consultadas, se impone la idea de solventar el asunto sin acudir de nuevo al Supremo. Durante el debate de estos días, se ha planteado que la situación de Junqueras y la del líder kurdo encarcelado por Turquía no son equiparables. El argumento se sostiene en el razonamiento de que Selahattin Demirtas no tuvo posibilidad de recurrir su orden de prisión, mientras que los políticos catalanes sí pudieron hacerlo en varias instancias.

También considera el Constitucional que las circunstancias del político turco y el catalán difieren en que el primero era, en el momento de su encarcelamiento, un diputado en ejercicio, mientras que Junqueras era solo un candidato a las elecciones forzadas por la aplicación del artículo 155 de la Constitución, que disolvió el Parlament retirándole la condición de diputado. Con todo, el hecho de que el alto tribunal no haya resuelto aún los recursos contra el 155, y, por tanto, sobre la pérdida del aforamiento de Junqueras, enmaraña aún más la cuestión.

“La doctrina sobre Demirtas debe ser analizada como un hecho nuevo”, aseguran fuentes del TC. Eso no significa que esté sobre la mesa la posibilidad de acordar la libertad del político catalán, sino más bien que el tribunal quiere blindarse ante la posibilidad de que el TEDH les cuestione por no tener en consideración la nueva jurisprudencia.

“El Constitucional quiere blindar las decisiones de los tribunales españoles frente a Europa”, aseguran en el tribunal. Además, las fuentes consultadas señalan que los miramientos sobre el caso de Junqueras suponen “un mensaje” al Supremo para que “tengan en cuenta” las decisiones que se están tomando a nivel europeo: “El Constitucional no quiere avalar todo lo que dice el Supremo. Si hay una doctrina nueva, tendremos que aplicarla”.

El caso de Selahattin Demirtas ya fue esgrimido en el último recurso de Jordi Sànchez que el Constitucional debatió. El pasado 20 de diciembre, los magistrados acordaron por unanimidad denegar la petición de excarcelamiento del diputado catalán, alegando que el caso del líder kurdo era “un procedimiento en el que ni el Estado español ni el recurrente en amparo han sido parte”, por lo que no existía circunstancia sobrevenida que alterase su caso. Sin embargo, en aquella decisión el tribunal pudo no entrar en el fondo al haberlo planteado Sànchez como una medida cautelar, algo que Junqueras no ha hecho.