La manipulación de las notas de un máster cursado en la Universidad Rey Juan Carlos (URJC) por la presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, está causando entre profesores, directores de másteres y coordinadores de grado indignación por el daño que estos hechos causan a la reputación de esta institución pública. Entre los docentes consultados, sólo el catedrático de Ciencia Política y de la Administración de la URJC, Manuel Villoria (dirigente de la ONG Transparencia Internacional) permite que su nombre trascienda: “Han convertido esta universidad en el basurero académico del PP”, afirma en conversación telefónica con eldiario.es.
Villoria señala que “la constante relación de cargos y carguillos del PP con la Universidad está destrozándola”. Este miércoles eldiario.es publicó que el profesor del máster falsificado de Cifuentes, Pablo Chico de la Cámara, fue colocado por el PP en el Ayuntamiento de Pozuelo. También que Enrique Álvarez Conde, quien fuera director del máster (aunque no está claro que lo fuera cuando, presuntamente, lo cursó Cifuentes), fue alto cargo de Mariano Rajoy en el primer Gobierno de Aznar, al frente del Instituto Nacional de Administración Pública.
La indignación en los campus de la URJC se palpa especialmente en las carreras más técnicas, en las que la tentación del enchufismo y el tráfico de influencias es más difícil. “Muchos profesores se matan a trabajar y al final te acaba cayendo esta mierda”, señala Villoria.
El catedrático asegura que, “nada más conocer la noticia” de la manipulación de notas escribió un correo electrónico al rector de la URJC, Javier Ramos: “Le dije que lo único que podía hacer por ayudar a la Universidad era ir él mismo a denunciar los hechos ante la Fiscalía”. Este catedrático desconfía de la investigación abierta por la Universidad. “Al fin y al cabo será realizada por funcionarios y los funcionarios están sometidos a la presión de la jerarquía universitaria”, añade Villoria.
Esa vía judicial ha sido abierta este jueves por diversas asociaciones de universidades públicas de Madrid, quienes han presentado una denuncia ante la Fiscalía Provincial. Reclaman que Cifuentes sea citada en calidad de investigada y aporte las pruebas que dice tener sobre la obtención del máster.
“Llamadas de arriba” para interesarse por notas
Una profesora contratada de la URJC e investigadora, que prefiere mantenerse en el anonimato, asegura que ella misma ha recibido en otras ocasiones llamadas “de arriba” interesándose por calificaciones de determinados alumnos y asegura que esto no pasa sólo en la Rey Juan Carlos: “Esta noticia podría darse en otras universidades públicas... y en las privadas, ni te cuento”.
Según esta investigadora la gran asignatura pendiente de la institución universitaria son “el control y la transparencia”. Esta opinión es compartida, con matices, por una directora de máster y coordinadora de un grado de la URJC que también quiere mantenerse en el anonimato.
“Aquí se creó en 2015 la Escuela de Másteres Oficiales, con una Oficina de Seguimiento y Garantía de Calidad, para evitar estas cosas”, apunta esta docente, y subraya el desánimo que cunde entre el profesorado: “Estábamos recién recuperados del escándalo de la salida del rector Suárez y ahora llega esto como un jarro de agua fría. Esto mancha a la Universidad y a los que trabajamos en ella”.
Esta docente se refiere a la polémica del ex rector de la URJC, Fernando Suárez, quien, según reveló en exclusiva eldiario.es en 2016, plagió artículos académicos e incluso la tesis doctoral de una alumna.
¿Es verosímil todo lo que está pasando con los documentos? Para esta directora de máster, nos encontramos ante “procesos absolutamente sospechosos”. “Yo no sé cómo han gestionado otros sus programas; pero yo en mi máster sí tengo un banco de datos y un sistema de archivo muy eficiente. De hecho, cuando vienen las comisiones de valoración para másteres acreditados en el Espacio Europeo de Educación Superior es imprescindible contar con un archivo eficiente. Los inspectores te pueden pedir aleatoriamente cualquier TFM (Trabajo de Fin de Máster) de un alumno y tienes que poder encontrarlo”.
Los docentes contactados coinciden en una cosa: en la URJC se trabaja mucho y muy duro y su reputación está siendo enfangada. También coinciden en que, desgraciadamente, nada de esto les pilla ya de sorpresa.
Este viernes una veintena de catedráticos y profesores de la URJC dirigen una carta al rector pidiendo que se investigue y esclarezca todo lo ocurrido y se depuren responsabilidades: