La Corte Penal Internacional (CPI) ratificó hoy su condena de 14 años de prisión emitida en 2012 contra el exlíder rebelde congolés Thomas Lubanga por reclutar a niños soldado entre 2002 y 2003 en la República Democrática del Congo, confirmaron fuentes judiciales.
El veredicto, recurrido por la defensa del criminal, dio la razón a la Fiscalía del caso, para la que, “sin lugar a dudas”, el acusado era responsable del alistamiento de menores de 15 años en un conflicto armado.
Según quedó demostrado durante el proceso, las fuerzas dirigidas por Lubanga reclutaban a niños y niñas para que intervinieran “activamente” en “hostilidades”, los alistaban en sus filas y les obligaban a realizar tareas domésticas, a luchar y a actuar como guardias personales de seguridad.
En el caso de las niñas, las obligaban a ser “esclavas sexuales” de los comandantes, pero los jueces decidieron no incluir este aspecto en la acusación entre otros motivos para agilizar el proceso.
Los menores pertenecían a la etnia “hema” en la región de Ituri (sureste de la R.D. del Congo), y se les reclutaba para participar en el conflicto armado local entre esa etnia y la “lendu”, que se disputaban el control de las minas de oro en la zona.
La de Lubanga fue la primera condena de la historia dictada por la CPI, que ha tardado casi diez años en resolver el caso.
La CPI investiga presuntos crímenes en Uganda, Sudán, República Democrática, Libia, Costa de Marfil y Kenia.
También ha abierto investigaciones preliminares en Afganistán, Georgia, Colombia, Guinea, Palestina, Honduras, Corea del Norte y Nigeria.