El ministro de Hacienda, Cristobal Montoro, atribuye el escándalo de dimisiones generado en la Agencia Tributaria a la mala relación del director del organismo con sus cargos de confianza. “Se llevan mal”, ha dicho Montoro, en conversación informal con eldiario.es durante la celebración del aniversario de la Constitución en el Congreso de los Diputados.
El ministro no ha escondido su enfado por la trascendencia mediática del escándalo y acusa directamente al partido socialista como instigador de las informaciones que dibujan una guerra en su departamento por la decisión de dar un trato fiscal de privilegio a la cementera. “Que el diario El País me monte un tiberio no es novedad”, señaló enfadado. “¿Quién lo cuenta? Os lo pregunto por si me entero de la fuente”, inquirió el responsable de Hacienda.
“A mí, lo de Cemex me ha servido para saber qué altos cargos del PSOE continúan con responsabilidades en la Agencia Tributaria”, señaló Montoro. A pocos metros de distancia, el entorno de Rubalcaba afirmaba en un corrillo con periodistas que “en la Agencia Tributaria se está produciendo una caza de brujas”.
Montoro elude cualquier relación personal con los cambios en la cúpula de la inspección fiscal. Según su relato, “es el director el que les ha dimitido”. Sin embargo, a la pregunta de si va a destituir al director de la Agencia Tributaria Montoro ha sido tajante: “No, no lo voy a hacer”.