Los agresores, uno de los cuales llevaba una bandera de España, se han dirigido corriendo al chico, que estaba solo, y le han empezado a dar puñetazos, patadas y golpear con palos mientras estaba en el suelo, aunque después se ha levantado con ayuda.
Los ultras que se habían concentrado a última hora de la tarde en la plaza Artós de Barcelona, en la parte alta de la ciudad, han bajado por la noche al centro.