Varias decenas de personas han protestado hoy ante el domicilio del ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, contra la reforma de la ley del aborto, al grito de “hipócrita” y de “aborto libre y gratuito”.
Los manifestantes se habían concentrado previamente frente a la sede madrileña del PP en la calle Génova, convocados a través de las redes sociales para llevar a cabo lo que han denominado un “escrache feminista”, que se ha repetido frente a las sedes populares de diversas ciudades, como Barcelona, Valencia, Oviedo o Sevilla.
El portal del titular de Justicia se encuentra custodiado por varios agentes policiales que han impedido a los manifestantes que se acercaran demasiado al domicilio.
“Aborto libre y gratuito”, “Escrache a Gallardón” y “nosotras parimos, nosotras decidimos!” han sido algunos de los gritos que los asistentes han proferido contra el ministro.
Posteriormente, los manifestantes se han trasladado hasta la calle Sagasta, donde los agentes han mantenido algún forcejeo con algunos de los asistentes y se han vivido momentos de tensión.
Según ha podido comprobar Efe, un joven ha sido conducido hacia un furgón policial con el rostro ensangrentado.
En la protesta realizada esta tarde frente a la sede central del PP, los manifestantes han cortado la calle Génova durante varios minutos, después de que los asistentes invadieran la calle sentándose en el asfalto para impedir el paso de los vehículos.
“Aborto legal para no morir”, “Nosotras parimos, nosotras decidimos” y “Madre libre. Los vientres libres harán hombres libres” son algunos de los mensajes que se pueden leer en las pancartas de los manifestantes, muchos de ellos con camisetas y banderas moradas.
Una de las mujeres que ha acudido al acto, Dolores González, ha calificado en declaraciones a Efe de “irracional” y “vergonzosa” la reforma anunciada por el Ejecutivo, y ha manifestado que sus miembros “son los primeros que no cumplen las leyes constitucionales”, al no ofrecer ni sanidad ni educación públicas ni una vivienda digna a los ciudadanos.
González ha afirmado que las políticas del PP están haciendo “retroceder 50 años” los derechos conseguidos por los ciudadanos: “se los han cargado”.
Las protestas frente a las sedes de los populares se han repetido en diversas ciudades, entre ellas Sevilla o Valencia, donde la Policía Nacional ha impedido a los manifestantes acceder a las puertas del edificio y ha identificado a un grupo de unas diez personas.
En Barcelona la concentración se ha prolongado durante más de una hora porque las participantes han organizado debates y han relatado sus experiencias, mientras que en Oviedo, el “escrache feminista” se ha desarrollado entre bocinas, pitos, gritos a favor del aborto y una gran pancarta en la que se podía leer: “118.359 mujeres no son invisibles. No a la ley del aborto”.