La nueva delegada del Gobierno en Cataluña, Teresa Cunillera, ha expresado hoy su “indignación” y “rabia” por la decisión de dejar en libertad provisional, tras el pago de una fianza de 6.000 euros, a los cinco integrantes de la Manada: “Las mujeres no somos un trozo de carne”, ha afirmado.
En su discurso en el acto de toma de posesión de su cargo, y saliéndose del guión que tenía preparado, Cunillera ha querido hacerse eco del auto de la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Navarra.
Tras expresar su “indignación” y “rabia” por esta decisión, ha expresado su “cariño” hacia la víctima y ha pedido a hombres y mujeres que lancen un “grito muy fuerte” para dejar claro que las mujeres “no somos un trozo de carne a disposición de hombres que no nos respetan”, y ha sentenciado: “No lo consentiremos”.
Tras la ceremonia de toma de posesión, el antecesor en el cargo de Cunillera, Enric Millo, ha declarado a los periodistas que la decisión judicial sobre la Manada tampoco le “gusta”.
“Respeto siempre la justicia y las sentencias de los jueces, pero a nivel personal discrepo de esta decisión”, ha recalcado Millo.