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El próximo 28 de mayo, doce comunidades autónomas acudirán a las urnas para elegir un nuevo parlamento regional. Los partidos se lanzan a la búsqueda de votantes cuya probabilidad de escoger una u otra papeleta está muy influida por el nivel de renta, haber nacido en la comunidad en la que se vota, tener o no estudios universitarios, residir en un barrio joven o vivir en una zona rural o urbana.
¿Cómo es el votante que optó por Ciudadanos en 2019 y que todos los partidos intentarán atraer en 2023? ¿Vota igual una persona joven en Extremadura que en Madrid? ¿Qué cosas tienen en común los que votan a PP y PSOE? ¿Cómo es el voto a los partidos regionalistas en cada comunidad?
elDiario.es traza un perfil de los votantes de cada partido a partir de los resultados de las últimas elecciones autonómicas en cada sección censal (la unidad territorial más pequeña en España) de las 12 comunidades que celebran comicios el 28M, cruzado con distintas variables demográficas de su población, como la edad media, los ingresos, el nivel de estudios o el lugar de nacimiento, obtenidas del Instituto Nacional de Estadística (INE).
La segregación por renta divide Madrid entre izquierda y derecha
Tras las elecciones autonómicas de 2021, la Comunidad de Madrid quedó dividida en barrios de izquierdas y de derechas. La clave de esta brecha fue el nivel de renta: a menos ingresos, más voto a las formaciones de izquierdas; a más ganancias, más voto a los partidos de derechas. Precisamente, esta fisura divide Madrid en dos: la zona norte de altos ingresos, con mucha población con estudios superiores y menos densa urbanísticamente frente al sur denso, pobre y con pocos estudios.
Se ve claramente en este gráfico: en el 10% de las secciones censales más pobres más de la mitad de los votos fueron para las izquierdas (Unidas Podemos, Más Madrid y PSOE). Su proporción disminuye en cada decil de renta hasta llegar al extremo opuesto. En el 10% de las secciones censales más acomodadas arrasó el voto a Vox, PP y Ciudadanos. Díaz Ayuso obtuvo sus mejores resultados entre la población más pudiente, frente al tercio de sufragios que cosechó entre el 10% más humilde.
El PSOE se lleva el voto de clase de la Comunitat Valenciana
Una de las características del voto al PSOE en España que se repitió en todos los territorios de las autonómicas de 2019 es que los socialistas siempre obtienen mejores resultados entre los votantes con menor nivel de estudios. Esto es, el llamado voto de clase. En la Comunitat Valenciana se observa bien esta correlación. El gráfico a continuación agrupa a la población de los municipios de toda la región según el nivel de estudios básicos alcanzado y en qué medida cada uno de estos grupos votaron a los socialistas.
Los barrios donde hay menor formación (más del 70% de sus vecinos sólo tienen estudios básicos) son los que más votaron a los socialistas, el 32%. Y viceversa: en aquellas secciones censales con niveles de estudios más elevados (menos del 20% de la población sólo tiene estudios básicos) el voto al PSOE se quedó en el 14%.
El PSOE concentra el voto de clase. Hay que tener en cuenta que las zonas cuya población cuenta con menor formación académica suelen ser también zonas más desfavorecidas económicamente y, por ende, con mayores tasas de paro. Tres correlaciones que en 2019 se dieron en todas las comunidades autónomas. En la siguiente tabla se aprecia que la tendencia se repite: a mayor tasa de desempleo, mayor porcentaje de voto a los socialistas.
El voto nacionalista de los nacidos en Canarias
¿Qué tienen en común las formaciones nacionalistas Coalición Canaria y Nueva Canarias? Cada una a un lado del espectro ideológico (y en su provincia con mayor fuerza electoral), obtuvieron mayor porcentaje de voto en los barrios y pueblos con más proporción de habitantes nacidos en el archipiélago.
En las secciones censales de Las Palmas con más del 90% de la población nacida en Canarias, el voto a Nueva Canarias fue del 22%, mucho mejor resultado que en aquellos lugares donde los originarios del archipiélago representan a menos de la mitad de los residentes. Caso idéntico a Coalición Canaria en Santa Cruz de Tenerife: en las secciones con menos del 50% de su población de origen canario les votó el 21%, pero en aquellas con más del 90% de habitantes nacidos en las islas cosecharon el 35% de los sufragios. Son 15 y 14 puntos de diferencia respectivamente.
Haber nacido en la comunidad en la que se vota es un factor determinante para los partidos nacionalistas y regionalistas, tal y como demuestran los datos del resto de elecciones autonómicas. Además de en Canarias, en 2019 esta correlación también se da en Baleares, donde Més y El Pi fueron las formaciones que mejores resultados obtuvieron entre los nacidos en el archipiélago. Lo mismo ocurrió en la Comunitat Valenciana con los resultados de la coalición Compromís. O incluso en Catalunya, donde el voto a partidos independentistas se concentra en los municipios y barrios con más población nativa.
Castilla-La Mancha: a la caza del voto joven de Ciudadanos
El PP se caracteriza por ser más popular en las zonas rurales y envejecidas de parte del país. Las últimas elecciones autonómicas en Castilla-La Mancha no fueron una excepción.
En Castilla-La Mancha, el Partido Popular obtuvo más de un tercio de los votos en las secciones censales donde la edad media supera los 48 años, mientras que no llegó al 20% en aquellos barrios y pueblos con una media de edad por debajo de los 38 años. Al contrario, Ciudadanos, que la mayoría de encuestas pronostican su desaparición de los parlamentos regionales en 2023, duplicó sus votos en las zonas jóvenes respecto a las más envejecidas en las últimas autonómicas.
El próximo 28M el PP podría aprovechar la caída de Ciudadanos para recoger sus votos en las zonas urbanas y más jóvenes, más ricas y con mayor población con estudios superiores, siempre y cuando no se le adelante Vox, un partido que logra mejores resultados en los barrios con este perfil. De hecho, los partidos de derechas se juegan el reparto del votante universitario que hace cuatro años apostó por Ciudadanos también en otras comunidades como Aragón y la Comunitat Valenciana.
Ricos, jóvenes y con estudios se movilizan por Vox en Murcia
Rozando el 10% de los votos, Vox consiguió cuatro escaños en Murcia en las últimas elecciones autonómicas. Los mejores resultados los obtuvo en los barrios y pueblos más ricos, jóvenes y con más población universitaria, como se puede ver a continuación aunque los votantes de la formación ultraderechista tuvieron un perfil más heterogéneo que en otras autonomías.
Vox consiguió más del 10% de las papeletas en las secciones censales del 20% más rico de la comunidad, en aquellas donde la edad media no llega a los 38 años y en las que más de uno de cada diez personas tienen estudios superiores.
El voto a Podemos e IU en Aragón es urbano y joven
Votar a la izquierda del PSOE es mucho más probable si eres joven y vives en ciudad (variables que suelen estar muy vinculadas). En Aragón, la suma de Podemos e Izquierda Unida obtuvo el 13% de los sufragios en las secciones censales donde la edad media no llega a los 40 años, mientras que en las que la población está más envejecida consiguieron menos del 9% entre ambos.
Esta tendencia se repite en muchas comunidades y también en las elecciones generales. Los morados tienen más fuerza entre votantes jóvenes, urbanitas y con estudios universitarios. Por ejemplo, en 2019 en Aragón consiguieron mejores resultados en las ciudades. En Zaragoza aglutinaron más del 13% del voto y, en cambio, se quedaron con el 8% en las zonas rurales.
La brecha en la izquierda estatal y autonómica
Al igual que en Canarias, en Baleares el lugar de nacimiento juega un papel fundamental a la hora de decidir el voto, sobre todo en la división de la izquierda. En 2019 las izquierdas a la izquierda del PSOE se presentaron por separado: por un lado, Més y Més per Menorca, formaciones autonómicas baleares; por otro, Unidas Podemos, de ámbito nacional.
Aunque ambas coaliciones obtuvieron resultados similares en porcentaje de voto y en número de escaños, la tendencia de voto cambia según el origen de sus votantes. Los morados obtuvieron mejores resultados entre los habitantes nacidos en otra comunidad autónoma, y Més y MxMe al contrario, tuvieron mayor voto en las secciones censales con más habitantes nacidos en el archipiélago.
En las zonas donde más de 1 de cada 4 habitantes nació en otra región, UP obtuvo un 11% de los votos, frente al 5% de Més. Y la tendencia se invierte a medida que cambia el origen de la población. En los lugares donde menos del 10% de la población nació en una comunidad distinta, la izquierda de ámbito nacional sólo cosechó el 5% de los votos frente al 19% de la izquierda regional.
El PSOE arrasa en las zonas rurales de Extremadura
Como en Castilla-La Mancha, en Extremadura el tamaño del municipio es un elemento clave a la hora de analizar los resultados electorales. Aunque Extremadura es un feudo histórico del PSOE, en 2019 los socialistas lograron mejores resultados en las zonas rurales que en las principales ciudades. Fernández Vara cosechó la mitad de los votos de los pueblos medianos y las zonas rurales (poblaciones de menos de 1.000 habitantes). En cambio, en Badajoz, Mérida y Cáceres, el voto al PSOE fue del 38%.
El voto socialista en las zonas rurales es un fenómeno del sur de la Península (Extremadura y Andalucía) a diferencia del Interior y muchas provincias del norte donde el PP consigue sus mejores resultados en las áreas despobladas.
Vox obtiene los mejores resultados en los barrios más ricos de Asturias
En las últimas elecciones autonómicas en Asturias se observó claramente cómo aumentó el voto a Vox con la renta. Los resultados de la formación verde en el 10% de las secciones censales más ricas de la comunidad casi triplicaron los que obtuvo en las zonas más empobrecidas. Precisamente, estas zonas suelen estar ubicadas en ciudades grandes donde la mayor parte de la población tiene estudios universitarios. En cambio, consiguió peores resultados en los barrios que donde hay más población en paro.
La correlación entre a mayor nivel de renta, más voto a Vox no fue exclusiva de Asturias. La probabilidad de votar a Vox aumenta con los ingresos. Como muestra la siguiente tabla, en 2019 la formación de extrema derecha obtuvo mejores resultados entre las secciones donde vive el 20% de la población más acomodada que donde vive el 20% más pobre de cada comunidad. En Asturias, esta brecha fue de 6 puntos porcentuales.
Los nacionalistas que triunfan entre los nativos en Navarra
EH Bildu y Geroa Bai podrían mejorar sus resultados en Navarra en las próximas elecciones, según apuntan las encuestas. Ambos partidos se disputan el voto nacionalista de izquierdas y consiguen mejores resultados entre la población nacida en esta comunidad autónoma.
En 2019 Geroa Bai obtuvo el 12,5% de los votos en las secciones censales donde menos del 60% de la población había nacido en Navarra mientras que duplicó el porcentaje en los barrios y pueblos donde más de cuatro de cada cinco personas son de origen navarro. Un fenómeno que se repite también en Euskadi y Catalunya donde los partidos nacionalistas consiguen mejores resultados entre los nativos.
Por su parte, el porcentaje de voto a EH Bildu en las zonas con más población nacida en Navarra triplicó el que la formación obtuvo en las zonas donde más personas han nacido fuera.
El voto de Revilla de las zonas con pocos estudios en Cantabria
Miguel Ángel Revilla consiguió ganar las elecciones de Cantabria en 2019 al frente del PRC conquistando las zonas rurales, más empobrecidas, con más población autóctona y con estudios básicos. Las encuestas no sitúan a su formación a la cabeza en estas elecciones, por lo que el PRC tendrá que luchar por no perder fuerza entre sus votantes mayoritarios.
En 2019 Revilla consiguió más del 40% de los votos en las secciones censales donde menos de una de cada cuatro personas han ido a la universidad, mientras que su porcentaje se reduce casi a la mitad en los pueblos y barrios con más de la mitad de población con estudios superiores.
La Rioja: el feudo del PP que pretende recuperar con el voto rural y envejecido
Los sondeos vaticinan un empate del bipartidismo en La Rioja el próximo 28M. El PP, que perdió el poder frente al PSOE en 2019 después de gobernar durante dos legislaturas, podría volver a ganar. La movilización de los más mayores y las zonas rurales sería clave para la victoria de los populares.
En las últimas elecciones autonómicas se contaron muchas más papeletas del PP en los barrios y pueblos con la media de edad más elevada que en los más jóvenes. Los populares consiguieron el 27% en las secciones censales donde la media de edad no llega a los 40 años mientras que superaron el 40% en las que la media está por encima de los 50 años.
Además, las zonas más envejecidas coinciden a menudo con los municipios rurales y con mayor porcentaje de población que solo tiene estudios básicos. Como muestra la siguiente tabla, los populares obtuvieron mejores resultados en zonas rurales (secciones censales con menos de 1.000 habitantes).
Esta proporción va disminuyendo a medida que aumenta el tamaño de la población, hasta lograr los peores datos en las grandes ciudades de varias comunidades autónomas.