Una tercera mujer denuncia por violación al teólogo islamista Tariq Ramadan

Una tercera mujer denunció haber sido víctima de violación por parte del controvertido teólogo musulmán suizo Tariq Ramadan, que está en detención provisional a las afueras de París tras otras dos denuncias por el mismo delito, informaron hoy medios locales.

En este caso, la denunciante asegura que mantuvo una relación con Ramadan durante 16 meses entre febrero de 2013 y junio de 2014 y que el teólogo se aprovechó de su situación de debilidad para violarla en nueve ocasiones.

Para apoyar la denuncia, sus abogados han aportado centenares de capturas de pantalla con mensajes de texto, fotos y vídeos intercambiados a través de diversas aplicaciones de móvil.

Ramadan, según la denunciante, se aprovechó de que la mujer, una exprostituta de lujo, estaba sin empleo, con dos hijos y en una situación desesperada para iniciar con ella una relación.

Cuando el teólogo se enteró de que ella había participado en las orgías sexuales por las que fue investigado el exdirector gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI) Dominique Strauss-Kahn, le amenazó con revelarlo y con publicar fotos eróticas de ella si no accedía a sus deseos sexuales.

Las violaciones y abusos tuvieron lugar en París y otras ciudades de Francia, pero también en Bruselas o Londres, según el testimonio.

Al igual que las dos denunciantes anteriores, la tercera relató a los investigadores la violencia con la que se comportó el teólogo islamista.

El teólogo está acusado de haber violado a una antigua seguidora suya en 2009 en París y a otra mujer, discapacitada, tres años más tarde en un hotel de Lyon, en el este de Francia.

Ramadan, de 55 años, nieto del fundador del grupo Hermanos Musulmanes, fue detenido en París el pasado 31 de enero, imputado dos días más tarde por presunta violación y mantenido en detención provisional para impedir que intimide a las denunciantes y que huya de la justicia.

El teólogo, que niega las acusaciones, asegura ser víctima de una campaña de descrédito y ha pedido su salida de la cárcel por motivos médicos, algo a lo que no ha accedido la justicia francesa.

Los seguidores de Ramadan han lanzado varias campañas a través de las redes sociales para demandar su liberación y para denunciar el ataque a una de las pocas figuras visibles del islám en Europa.