La Asamblea Popular de Lavapiés 15-M ha emitido este lunes un manifiesto de apoyo a los 14 jóvenes detenidos durante la noche del 15 de mayo de 2011, que serán juzgados dentro de tres meses, el próximo 11 de febrero. “En febrero de 2019 nos juzgan a todas”, dice la nota emitida, que añade: “No nos quedaremos ni calladas ni quietas”.
Así, el manifiesto emitido por el colectivo asambleario también exige “la absolución para los 14 del 15M y la revisión de todas las causas judiciales pendientes”. En concreto, la Fiscalía pide un total de 74 años para los detenidos, con penas de hasta 6 años en la mayoría de casos. Se les acusa de delitos de desórdenes públicos, daños, resistencia, atentado a agentes de la autoridad, faltas y delitos de lesiones.
Los acusados fueron detenidos e incomunicados durante 72 horas y, destacan, denunciaron a su salida de comisaría “agresiones y vejaciones, tanto en el momento de la detención como durante los días que pasaron en los calabozos”. “No fue objeto de ninguna investigación ni por parte de la Fiscalía ni de ninguna otra institución gubernamental”, lamenta el texto, que subraya “los cambios en la versión de la policía y los hechos y cargos de que se iba acusando a los detenidos”.
“Años de instrucción de un juicio en el que no hay más pruebas que las declaraciones de los policías, y años desde que esa fase de instrucción se cerró hasta que los tribunales han tenido a bien fijar una fecha para el juicio”, lamenta el manifiesto, ya que la cita judicial se celebrará prácticamente 8 años después de los hechos por los que se les acusa.
A través del hashtag #15MLibertad, distintos usuarios de redes sociales han mostrado su apoyo a los encausados. Entre ellos, algunos dirigentes de Podemos. “Es un escándalo que se persiga a gente que puso el cuerpo para mejorar la vida de todos”, escribió Pablo Iglesias, secretario general de la formación. Por su parte, Íñigo Errejón apuntó que “el 15M nos hizo mirar de frente a nuestro futuro, eso no se puede condenar”; mientras que Ione Belarre calificó de “muy grave criminalizar el derecho de reunión y manifestación”, por lo que también pidió libertad para los acusados: “Porque fueron somos”.