La dirección del PP da por seguro que Alberto Núñez Feijóo anunciará en abril su candidatura a la presidencia de la Xunta. “Alberto es un político responsable”, señalan en el entorno de Rajoy, donde dan por seguro que el presidente gallego repite. No todos opinan lo mismo. En los últimos meses, a Feijóo le dibujan como un político cansado y a punto de irse a la empresa privada.
Las encuestas en Galicia se lo ponen muy difícil al PP. Las hemerotecas recientes les dan mayores posibilidades. Tras la dimisión de José Ramón Gómez Besteiro, el PSOE gallego se queda sin candidato. Lo mismo en Podemos y en En Marea, donde todavía no han definido su proyecto para las autonómicas de otoño.
El PP gallego no cree posible revalidar su mayoría absoluta, pero ansía obtener la renta suficiente para que un pacto con Ciudadanos pueda frenar a las mareas y a los socialistas.
Fuentes cercanas a Rajoy aseguran que la decisión está tomada y que Feijóo repite por responsabilidad. Feijóo, sin embargo, todavía no ha hecho referencias sobre su futuro.
El líder gallego tiene en su mano la posibilidad de defender al PP. Sin embargo, no le apetece repetir y lo ha insinuado por activa y por pasiva. En conversaciones informales, el presidente gallego desliza su descontento con el partido y con la situación generada tras el 20D.
El equipo de Rajoy está entregado a la tarea de campaña, convencido de que habrá nuevas elecciones generales, que podrían celebrarse al tiempo que las gallegas. Ese planteamiento sitúa a Feijóo como el último baluarte de los conservadores para enfrentar su discurso con Podemos y con el PSOE.
Feijóo mantiene las dudas. El presidente de la Xunta se limita a asegurar que su partido será el primero en presentar un candidato. Sin dar nombres ni apellidos.