La dirección del PSOE ha decidido poner freno a cualquier debate sobre el liderazgo de Rubalcaba tras las derrotas electorales en Galicia y País Vasco. “No es el momento de abandonar las responsabilidades -ha dicho la número dos del partido, Elena Valenciano- sino de asumirlas con más fuerza”. Valenciano ha señalado que “el congreso del PSOE nos dio un mandato y una tarea”, en referencia a la elección de Rubalcaba como líder del partido. Sobre la posibilidad de una dimisión de su líder, Valenciano ha zanjado con un “no se ha planteado la dimisión de Rubalcaba”.
El calendario de los socialistas se acelera a partir de ahora y como prioridad se plantean la celebración de una gran Conferencia Política para principios de 2013. Ante las críticas internas, Valenciano advierte que a partir de ahora “no se trata de deslumbrar. Se trata de convencer, aunque esto lleve más tiempo y se trata de avanzar, no de buscar atajos”.
Según Valenciano, “el resultado de estas elecciones nos dice que tenemos que seguir con la tarea de oposición a una política que es muy mala para España y que a la vez tenemos que acelerar la presentación de propuestas alternativas que hagan ver a los ciudadanos que hay otra solución”.
La dirección socialista es pesimista con sus opciones electorales a día de hoy. Según Valenciano, el ciclo electoral negativo para el PSOE “todavía no ha terminado”. “Somos conscientes que estamos obligados a volver a merecer la confianza de los ciudadanos que seguramente decepcionamos”.
Preguntada sobre las declaraciones de López Aguilar en el sentido de que este es el peor momento de la historia del PSOE, Valenciano señala que “no sé si es el peor, pero desde luego es malísimo. Juan Fernando tiene razón”. A la pregunta de si los socialistas se plantean impulsar un proceso de primarias para aclarar ya quién será su candidato a las próximas generales, Valenciano ha respondido que “quién va a ser el candidato no es ahora el debate”.