El Gobierno de Estados Unidos decretó hoy la imposición de sanciones económicas contra Rusia por los ataques cibernéticos que atribuye a ese país durante la pasada campaña de las elecciones presidenciales estadounidenses, según informa hoy el New York Times.
El Departamento de Estado declaró “personae non gratae” a esos 35 funcionarios de la Embajada rusa en Washington y el Consulado de ese país en San Francisco, a los que ha dado “72 horas para abandonar Estados Unidos”.
Los diplomáticos “estaban actuando de una manera que no es coherente con su estatus diplomático o consular”, explicó el Departamento de Estado en un comunicado.
El presidente estadounidense, Barack Obama, firmó una orden ejecutiva con la que sancionó a once individuos, organismos y empresas vinculadas con los ataques informáticos.
Washington sancionó en primer lugar al Departamento Central de Inteligencia ruso (servicio militar de inteligencia, GRU por su acrónimo en ruso) y al Servicio Federal de Seguridad (servicio de seguridad nacional, FSB, el heredero del antiguo KGB).
Entre las seis personas sancionadas con la congelación de sus bienes están Vladimir Stepanovich Alexseyev, Sergei Gizunov, Igor Kostyukov e Igor Korobov, que ocupan cargos directivos en el servicio de espionaje militar ruso.
Asímismo, figuran Aleksei Alekseyevich Belan (con pasaporte lituano) y Evgeniy Mikhaylovich Bogachev, dos individuos a los que no vincula directamente con los organismos de inteligencia pero que Washington acusa de apropiación indebida de fondos y de datos personales a través de ataques informáticos.
Adicionalmente, Washington impuso sanciones contra tres empresas rusas dedicadas a seguridad cibernética a las que acusa de proveer las herramientas al GRU y al FSB para los ataques.
Asimismo, el Departamento de Estado informó al Gobierno de Rusia de que “negará a personal ruso acceso a dos complejos recreativos en EEUU que posee el Gobierno ruso”.
Estados Unidos adoptó esas medidas en respuesta a “la interferencia de Rusia en las elecciones de EEUU” y a un “patrón de acoso” a sus diplomáticos en ese país que se ha incrementado en los últimos cuatros años.
“Ese acoso incluye paradas arbitrarias de la Policía, agresión física y la retransmisión en la televisión estatal de detalles personales sobre nuestro personal que los pusieron en riesgo”, afirma la nota oficial.
“Las acciones de hoy envían un claro mensaje de que semejante comportamiento es inaceptable y tendrá consecuencias”, agrega el comunicado.
El Gobierno estadounidense también decretó hoy sanciones económicas contra individuos y entidades rusas relacionadas con el espionaje por el mismo motivo.
Las agencias de inteligencia estadounidenses coinciden en que Rusia interfirió en la campaña de los comicios presidenciales del 8 de noviembre con ataques informáticos contra el Partido Demócrata y la campaña de su candidata, Hillary Clinton, para ayudar a la elección del republicano Donald Trump.
Trump, que ha expresado discrepancias con las conclusiones de los servicios secretos de su país, ha insinuado que quiere un cambio de rumbo en las actuales tensas relaciones que mantienen Washington y Moscú.