La participación electoral en Euskadi a las 17:00 horas se ha desplomado con relación al mismo momento de las elecciones autonómicas de 2016: 8,36 puntos menos. Así, hasta esa hora ha votado el 36,02 % del electorado frente al 44,38 % de los comicios de hace cuatro años, que se celebraron en el mes de septiembre. Cuando solo quedan dos horas para el cierre de los colegios electorales, el índice de participación, una de las grandes incógnitas de la jornada en el País Vasco, va notablemente a la baja.
La participación ha caído en los tres territorios. Donde más cae es en Álava, un 9,27%, seguida de Bizcaia, con un desplome del 8,46% y por último, en Gipuzkoa cede un 7,79%.
Escriben Eduardo Azumendi y Raúl Sánchez. Más aquí.
Nuevo baile en los datos de las elecciones gallegas. El PSdeG de Gonzalo Caballero ha recuperado su escaño número 15, que lleva un rato bailando entre el rojo y el azul del PP, que vuelve a caer a 41 escaños, los mismos que obtuvo en las anteriores elecciones gallegas.
Vuelve a cambiar de color el último escaño que está en juego en Galicia. El PP ha recuperado a esta hora el escaño número 42, que había perdido hace unos minutos en favor del PSdeG, que vuelve a tener 14. El BNG se mantiene con 19 escaños.
Cuando está llegando al final el escrutinio de las elecciones gallegas (99,37%), el PP ha perdido un escaño y ha pasado de los 42 a los 41, por lo que mantiene el número actual.
El escaño pasa al PSdeGa, que se queda por el momento con 15, uno más que en los comicios anteriores. El parlamento sigue teniendo tres fuerzas y la segunda de ellas continúa siendo el BNG, que tiene 19 asientos.
Después de lograr su cuarta mayoría absoluta consecutiva, Alberto Núñez Feijóo aseguró sentirse “emocionado” y “agradecido por tanta generosidad” de gran parte del electorado gallego. A su vez, el presidente de la Xunta dejó claro que no iba “a poner a nada ni a nadie por delante de esta comunidad” y que continuará al frente del Gobierno “hasta el final” de su mandato. “No me confundí cuando aposté por Galicia y hoy tengo claro que mereció la pena”, indicó.
Núñez Feijóo también aprovechó su comparecencia, en la que estuvo arropado por familiares y miembros de su partido, para recordar a las 619 víctimas de la COVID-19 en la comunidad, a las que el líder popular afirmó que llevaría consigo “durante toda la legislatura”. También dedicó algunas palabras para los expresidentes Fernández Albor y Manuel Fraga, “que estarían orgullosos del Partido Popular de Galicia” tras estos resultados según Feijóo.
Informa Álex Vázquez.
“El lehendakari se levanta todos los días a las seis de la mañana. Nunca olvidaré mi primer día. ¡Me despertó con un 'whastapp' de los suyos, tremendamente largo, a las seis y media. '¿Pero qué narices hace despierto a estas horas?', pensé”. Esta anécdota de Iñigo Urkullu Rentería (nacido en 1961 en Alonsotegi, cuando aún era Barakaldo, y residente en Durango), la cuenta uno de los 13 consejeros de su partido que le han acompañado desde 2012 –los otros cuatro son del PSE-EE. El Urkullu de 2020 sigue siendo trabajador, meticuloso y con “nulo sentido del humor”, aunque hay una gran diferencia con su yo de 2012 ó 2016 más allá de las canas: se ha convertido en abuelo. En la pandemia ha nacido Peru, su primer nieto y del que apenas ha disfrutado por el estado de alarma.
“Como le ha pasado a todo el mundo, durante la pandemia no pudo ver a su madre [es hijo único y su padre ya falleció]. Ni apenas a su primer nieto, que justo nació durante el confinamiento”, explican sus colaboradores. “Por precaución” y por trabajo. Si habitualmente inicia muy temprano su jornada después de activarse con “fruta, café con leche y cereales” mientras repasa la prensa, durante la gestión del coronavirus ha sido habitual que, para las ocho y media, convocara ya la primera reunión con los responsables de Osakidetza para evaluar la evolución de la pandemia. “Durante estos meses nos hemos reunido y hablado no solamente todos los días, sino varias veces al día. Yo me he sentido absolutamente acompañada y arropada por el lehendakari. El lehendakari ha confiado en el equipo de Salud y esa confianza ha redundado en nuestra propia confianza a la hora de afrontar esta pandemia. Desde los primeros momentos durísimos en los que tuvimos que adaptarnos contra reloj a una situación absolutamente inesperada y gravísima”, resume una de las personas con las que más tiempo ha compartido desde que el 28 de febrero Euskadi se golpeara con el primer positivo en COVID-19, Nekane Murga, consejera de Salud.
Lo escribe Iker Rioja Andueza. Más aquí.
“El modelo Casado-Feijóo se ha impuesto claramente al modelo Sánchez-Iglesias”. Esta es la lectura que ha realizado la dirección nacional del PP de las elecciones de este 12J, obviando el fracaso de la coalición PP+Cs en Euskadi, una de las grandes apuestas personales de Pablo Casado. En rueda de prensa, el secretario general del PP, Teodoro García Egea, ha pedido al Gobierno que “reflexione”.
“Los ciudadanos han premiado las propuestas del PP, que hayan puesto la salud por encima de la ideología. Ese equipo unido que tiene el PP ha permitido que el modelo Casado-Feijóo se haya impuesto al modelo Sánchez-Iglesias”, ha señalado. Respecto al resultado en Euskadi, García Egea ha asegurado que “en el País Vasco es importante que las personas del centro derecha tengan un espacio en el que unirse”, por lo que se ha comprometido a “construir una alternativa”. “Todo nuestro apoyo a Carlos Iturgaiz, que ahora tiene que liderar la alternativa al PNV”, ha dicho, apuntando a una posible designación del candidato como nuevo presidente del PP vasco.
Informa Iñigo Aduriz.
“¡Vaya hostia!”. En el PP es recordada la imagen de Rita Barberá lamentando los resultados electorales de 2015, que la sacaron de la alcaldía de Valencia. En las filas de los 'populares' vascos no pocos pensaban exactamente eso mismo y justamente con las mismas palabras al conocer que la candidatura de Carlos Iturgaiz se queda en solamente 5 escaños, uno de los cuales recaerá en José Manuel Gil, un guipuzcoano de Ciudadanos empotrado en Álava. Sin embargo, ovacionado y con un cierto tono triunfalista, Iturgaiz ha orillado toda autocrítica en su valoración de los resultados. Como si nada hubiera ocurrido.
A juicio de Iturgaiz, los datos del 12 de julio son una “meta volante para acabar con el Gobierno de Sánchez e Iglesias”. “Esto es una carrera de fondo”, ha indicado Iturgaiz, que ha dado a entender que liderará un “grupo constitucionalista” en el Parlamento Vasco “con más fuerza que nunca”. “Esta coalición va a ser el referente”, ha clamado.
Amaya Fernández, presidenta del PP vasco, no ha ofrecido ni un solo mitin en esta campaña. Su línea, que es la de Alonso, ha quedado completamente desplazada. Iturgaiz ha intentado seducir a los votantes de Vox y el resultado es que Vox ha crecido en votos -y logrado un escaño en Álava- y que las fugas a otros caladeros más moderados no se han detenido. En los últimos años ha sido el PNV el gran beneficiario de la paulatina pérdida de peso de los 'populares'. “No se puede emprender una huida hacia adelante como si no hubiera ocurrido”, ha declarado Fernández lejos del optimismo de Iturgaiz y calificando de “triste” lo ocurrido este 12 de julio.
Informa Iker Rioja.
Gana Alberto Núñez Feijóo, el único presidente autonómico de toda España que gobierna con mayoría absoluta, la cuarta desde 2009. Ha resistido a la crisis, al hundimiento de su partido, a unas fotos con un narco... Galicia es una anomalía. La única autonomía donde el bloque conservador permanece unido, de las pocas donde Vox es extraparlamentario. Casi la única región española donde las clases más desfavorecidas y rurales votan mayoritariamente a la derecha, mientras que las ciudades –más ricas– son de la izquierda.
Gana Feijóo, y no el Partido Popular, cuyas siglas escondió el candidato porque solo le restaban. Gana Feijóo por méritos propios y también gracias a la inestimable ayuda de sus contrarios, incapaces de construir una alternativa en una comunidad autónoma que es bastante menos conservadora de lo que aparenta su parlamento. Por bloques –izquierda vs derecha– la distancia en número de votos no es tan amplia. La división de la izquierda y una ley electoral que sobrepondera a las provincias más rurales y conservadoras es lo que explica que Feijóo vaya tan sobrado de escaños. Viendo este parlamento, nadie diría que la izquierda gobierna seis de las siete principales ciudades gallegas y tres de las cuatro diputaciones.
Por Ignacio Escolar. Más aquí.
Ferraz admite que los resultados en Euskadi y Galicia “no son buenos”, pero hace equilibrios a la hora de valorarlos porque, por un lado, asegura que no se pueden leer en clave nacional por la “singularidad” de los territorios al mismo tiempo que reconoce que el “desgaste” podría haber sido incluso mayor con la “ofensiva” del PP. Los de Pedro Sánchez no han conseguido ninguno de sus objetivos en Galicia, donde Alberto Núñez Feijóo revalida la mayoría absoluta y se quedan como tercer fuerza por detrás esta vez del BNG y en Euskadi crecen ligeramente y suben un diputado colocándose de nuevo como imprescindibles para el PNV. “Son resultados que apuntan a la continuidad en ambos gobiernos autonómicos”, ha expresado José Luis Ábalos.
El secretario de Organización del PSOE ha enfatizado que los socialistas se han mantenido más o menos igual que hace cuatro años -cuando las elecciones vascas y gallegas precipitaron la crisis interna que acabó con la dimisión de Pedro Sánchez- y ha asegurado que el desgaste podría haber sido mayor con la campaña de “derribo” que se ha llevado a cabo contra el Gobierno en los últimos meses. Así, ha asegurado que “la ofensiva de Casado ha sido un fracaso”. “La única interferencia clara de ámbito nacional ha sido en Euskadi y no ha salido bien”, ha dicho sobre la estrategia del PP.
Preguntado por si se ha castigado la gestión del Gobierno dada la implicación del propio Sánchez en la campaña, que ha girado en buena medida sobre la gestión de la pandemia, Ábalos ha contestado: “Me lo podría plantear de otra forma: ¿cómo ha aguantado el PSOE la ofensiva de estos meses, de estigmatización de los dirigentes que hemos estado al frente de la pandemia y no se ha producido en Euskadi, donde tenemos un diputado más y en Galicia nos hemos quedado igual. Podríamos haber sentido más”.
Escribe Irene Castro.
La presidenta de Ciudadanos, Inés Arrimadas, ha mantenido esta noche silencio sobre los malos resultados electorales cosechados por su partido en Galicia y también por el fracaso de la coalición con el PP en Euskadi.
Aunque la formación que lidera se ha beneficiado de ese acuerdo logrando por primera vez representación en el Parlamento de Vitoria, el experimento con los de Casado no ha funcionado.
Arrimadas, que sigue de baja por maternidad, ha participado en ambas campañas con un solo acto -el central- en cada comunidad. El último mensaje que subió a su perfil de Twitter ha sido este mismo domingo animando a acudir a las urnas a la ciudadanía en Euskadi, junto a la imagen del candidato de la coalición, Carlos Iturgaiz, votando.
La Ejecutiva Nacional del partido se reúne este lunes para analizar los resultados en ambas autonomías y hacer su primera valoración oficial.
Informa Carmen Moraga.