El consejero de Presidencia, Justicia e Interior de la Comunidad de Madrid, Enrique López, ha pedido su baja como militante del PP, tal y como ha informado el diario Abc y ha confirmado elDiario.es de fuentes de la dirección nacional del partido y del propio consejero regional. López, juez de profesión, allana así el camino para dejar la política y volver a la judicatura en el caso de que Isabel Díaz Ayuso no cuente con él para las listas electorales del próximo 28 de mayo.
“He solicitado mi baja como militante en el PP, lo cual no supone en absoluto renunciar a la defensa de los principios y valores que representa la ideología de este partido”, ha explicado el propio López en unas declaraciones difundidas a los medios de comunicación, en las que ha explicado que la presidenta de la Comunidad de Madrid ya era conocedora de la decisión. El exmagistrado del Tribunal Constitucional seguirá con sus labores en el Gobierno regional mientras cuente, ha dicho, con la “confianza” de Ayuso.
“Esto me va a permitir seguir trabajando mientras cuente con su confianza [la de Ayuso] con mayor ahínco con mayor entrega en el Gobierno de la Comunidad de Madrid, trabajar por los madrileños y trabajar por y para la persona de la presidenta Isabel Díaz Ayuso”, ha insistido López. Preguntado a su entorno por si las intenciones de López pasan por volver a la judicatura tras abandonar la militancia en el PP, la respuesta es que a día de hoy “sigue trabajando en el Gobierno” regional.
Las relaciones de López con la también presidenta del PP de Madrid no pasan por su mejor momento, después de que fuera una de las personas de mayor confianza del expresidente del partido Pablo Casado con quien Ayuso se enfrentó tras las acusaciones del exlíder del PP de corrupción por adjudicar a dedo un contrato en el que se benefició su hermano, Tomás Díaz Ayuso. Esa batalla la perdió Casado del que López era una de las personas de su mayor confianza, hasta el punto de que se descolgó de una rueda de prensa con otros dos consejeros para respaldar el contrato de Ayuso por el que se benefició su hermano con una comisión.
López fue uno de los perfiles que Casado impuso en el Gobierno de Ayuso cuando esta fue nombrada presidenta de de la Comunidad de Madrid en 2019, tras el acuerdo de coalición con Ciudadanos. López llegaba al Gobierno de Madrid como uno de los hombres de Génova, al igual que el consejero de Hacienda, Javier Fernández-Lasquetty, hoy uno de los hombres fuertes de Ayuso. En ese primer Gobierno regional, López ganó peso y ejercía como uno de los portavoces de la presidenta regional.
Tras las elecciones del 4 de mayo, López ascendió a número dos del Ejecutivo sumando la Consejería de Presidencia a la de Justicia e Interior. Pero todo cambió en la guerra de Ayuso contra Casado en la que López no se posicionó claramente desde el principio. El hecho más sonoro fue esa rueda de prensa en la que se anunció su participación y a la que se borró en el último momento.
Desde entonces, Ayuso no ha querido confirmarle ni en público ni en privado como candidato a las listas de las próximas elecciones de mayo que ella misma encabezará. El pasado junio, al poco de hacerse con la presidencia del PP de Madrid, Ayuso lo relegó en el Gobierno regional poniéndole por encima a Enrique Ossorio, al que nombró vicepresidente y asignó la coordinación del Gobierno, hasta entonces responsabilidad de López.