Mariano Rajoy se ha enfrentado este martes en la sesión de control en el Senado a la siguiente pregunta de ERC: “¿Es usted el señor X que dirige la Operación Cataluña?”. Se la ha formulado la senadora Mirella Cortés, sustituta en la portavocía del senador Santiago Vidal.
Ante el escándalo de la bancada conservadora, Cortés ha recordado la “conspiración” de Jorge Fernández Díaz con Daniel de Alfonso, las grabaciones de la conversación en las que se hablaba del presidente como “la discreción personificada” y el envío de mensajes comprometedores por parte de Jorge Moragas a Victoria Álvarez, amiga de Jordi Pujol hijo y grabada con Alicia Sánchez Camacho en otra conversación.
“Le pregunto por nabos y me contesta coles”, se ha quejado la senadora ante la respuesta del presidente de que su prioridad es gobernar para superar la crisis también en Cataluña.
Cortés ha sumado a esos escándalos la actuación de Eugenio Pino, responsable del mando operativo, y la publicación de informaciones falsas sobre una cuenta en Suiza del exalcalde de Barcelona.
“¿Niega usted que exista una operación encabezada por dirigentes del PP catalán, su director de gabinete y diferentes cargos de las fuerzas y cuerpos de seguridad del estado para destruir a un movimiento político y el pluralismo. Niega usted que lo que se ha organizado es un nuevo GAL sin violencia física pero mantenida con malas artes, dossieres falsos y periodistas comprados con recompensas a cargo de fondos reservados?”.
Rajoy ha felicitado a la senadora por el “tono constructivo empleado” y la ha acusado de acogerse al argumento de la conspiración “ porque ahorra la molestia de pensar, exculpa de responsabilidad y la endosa al mejor amigo del hombre, el chivo expiatorio”.
Con esta salida, el jefe del Ejecutivo se ha ahorrado toda respuesta y ha brindado con la recientemente acuñada como “operación zanahoria” en referencia al hasta ahora poco fructífero diálogo entre Generalitat y Gobierno.