La presencia del presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, en un acto en Karlsruhe (oeste de Alemania), desató enfrentamientos entre seguidores del oficialista Justicia y Desarrollo (AKP) y opositores, que acusan al jefe del Estado de romper la neutralidad ante las próximas elecciones parlamentarias.
Los incidentes se produjeron antes de la llegada de Erdogan al pabellón donde, según cifras de los organizadores, le esperaban unos 14.000 seguidores.
La policía local había preparado un fuerte dispositivo de seguridad, en previsión de posibles altercados, pero no logró evitar que grupos de seguidores del AKP que esperaban fuera del edificio atacaran a simpatizantes del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK).
En los incidentes se produjo un número indeterminado de heridos, según fuentes policiales, principalmente entre los simpatizantes del PKK, hasta que las fuerzas de seguridad lograron controlar la situación.
Varias organizaciones turcas, afines a la oposición, habían llamado a manifestarse contra el acto de Erdogan en Alemania, que se produce semanas antes de las parlamentarias del 17 de junio.
Al presidente turco se le acusa de haber roto el precepto de neutralidad inherente a su cargo y hacer claramente campaña a favor del AKP, en este caso desde Alemania, donde viven cerca de un millón y medio de ciudadanos con derecho a voto en Turquía.