Esperanza Aguirre ha comparecido en la sede del PP de Madrid, en la calle Génova de Madrid, a las 14.20 horas de este domingo en un encuentro que no estaba previsto. Aguirre ha dimitido de su cargo debido a las últimas noticias sobre las investigaciones judiciales al partido por posible financiación irregular dentro de la trama Púnica.
“Asumo mi responsabilidad política de todos estos años”, ha afirmado Esperanza Aguirre, que se ha querido desmarcar del conocimiento de cualquier “ilicitud o ilegalidad” en el PP de Madrid, pero ha entendido que es su responsabilidad política dimitir por el nombramiento de cargos como el de Francisco Granados.
Fuentes del PP informan que Ignacio Goznález dimitió hace unos días como secretario general del PP en Madrid, aunque su cese no fue comunicado por el partido.
La dimisión de Aguirre llega después de los registros realizados este jueves por la Guardia Civil en la sede de la calle Génova, que investigan una posible financiación ilegal del Partido dentro de la Operación Púnica.
Ese día, después de conocerse la actuación de la Unidad Central Operativa (UCO), Esperanza Aguirre afirmó a su salida de la sede del PP que “financiación ilegal del PP de Madrid, que a mí me conste, no ha habido nunca”.
“Yo no voy a estar encausada por nada, pero soy la presidenta de PP de Madrid y es mi responsabilidad”, ha afirmado ahora este domingo. “Es tiempo de sacrificios y de cesiones”, ha añadido.
Ante las preguntas sobre si Mariano Rajoy debería seguir sus pasos y dimitir por los numerosos casos abiertos de presunta corrupción en sus filas –entre los que descatan la última operación contra el PP de Valencia–, Aguirre ha dicho: “El señor Rajoy debe seguir su camino. Creo que está ahora en una situación muy importante y él mejor que andie sabe lo que tiene que hacer”.
Sí ha afirmado que ha comunicado su decisión al presidente del Gobierno en funciones, cuya primera respuesta ha sido “te entiendo”, en un mensaje de texto, según Aguirre. Después Rajoy y ella han mantenido una conversación telefónica “cordial”.
“Las cosas que se habían dicho de Granados parecían que no estaban vinculadas al Partido Popular de Madrid”, ha afirmado sobre la relación de Francisco Granados con la trama Púnica, conocida desde hace meses.
“No me he ocupado de cuestiones económicas”
“Yo no me he ocupado de las cuestiones económicas en este tiempo. A lo mejor me tenía que haber ocupado, pero había cosas que consideraba más importante, como cumplir los compromisos electorales”.
“Es que tenemos el caso Gürtel en esta casa, de 2009, y estamos en 2016 y ni siquiera se ha abierto juicio oral”, ha apuntado Esperanza Aguirre sobre la lentitud de la justicia, que espera que sea más rápida en esta investigación.
Aguirre ha añadido que va a seguir como portavoz del PP en el Ayuntamiento de Madrid. “Por supuesto”, ha respondido a la pregunta de una periodista.
“Ha sido una decisión personal. Yo tenía claro que quería comparecer en la Comisión de Investigación de Corrupción del viernes”, ha sostenido sobre los motivos para dimitir ahora.
“La corrupción nos está matando a todos, pero las noticias de ahora hacen que llueva sobre mojado.La gente ya no quiere más, la gente quiere gestos y éste es mi gesto”.
Sucesión al frente del PP de Madrid
A las preguntas sobre qué persona relevará a Esperanza Aguirre tras su dimisión, se abren varias posibilidades. “El PP de Madrid pertenece a una organización nacional y tiene en su mano diversas soluciones. Una es nombrar a una gestora y otra es convocar una junta directiva regional” para elegir la sucesión.
“Yo les recuerdo que el mismo día de las elecciones propuse un congreso extraordinario y abierto, para que cada militante tuviese un voto” en la elección del presidente del partido, ha agregado. En su opinión, es una elección que “hay que poner en manos de los militantes”.
“La solución creo que ahora será temporal. Si se convoca un Congreso, yo defenderé un congreso abierto para que los militantes se puedan expresar”, ha destacado.