La eurodiputada sancionada por acoso se da de baja del PSOE

Han pasado tres meses desde que la eurodiputada socialista Mónica Silvana fuera sancionada por acoso a sus asistentes sin que los socialistas tomaran más medidas que la suspensión de 30 días que le impuso el Parlamento Europeo. Ahora ha trascendido que solicitó su suspensión de militancia en el PSOE, según adelantó la Agencia Efe y han confirmado a elDiario.es fuentes socialistas. También ha salido de la delegación socialista española. No obstante, sigue formando parte del grupo de los Socialistas y Demócratas (S&D) que pilota Iratxe García.

La Eurocámara impuso a Silvana la máxima sanción prevista por el acoso a sus tres asistentes desde el inicio de la legislatura hasta el año 2021, cuando decidieron interponer la queja formal. Tras un proceso que se alargó más de un año y medio, la Eurocámara dio por acreditado el acoso psicológico para el que habían presentado informes médicos. Además de la suspensión de actividad, el castigo suponía la rescisión de las dietas durante ese periodo, lo que supuso unos 10.000 euros.

Silvana aseguró que había sido “injustamente sancionada” y cargó contra el sistema. “No he tenido las mínimas garantías procesales que hubiese tenido en cualquier proceso de la justicia ordinaria. Por solo poner un ejemplo, el dossier ha estado dirigido por una asistente parlamentaria de la ultra derecha europea, y los testimonios clave de personas que continúan trabajando conmigo no han sido escuchados ni tenidos en cuenta”, afirmó entonces en un comunicado en el que apuntaba que recurriría al Tribunal General de la UE.

Por ahora Silvana ha recurrido y el caso sigue abierto. Esa es la razón por la que la eurodiputada asegura que su baja de militancia es temporal. Fuentes del S&D explican que tomarán decisiones en función del resultado de ese procedimiento.

El acoso en la Eurocámara no es un incidente aislado. Según los datos recogidos por la Agencia EFE, entre 2013 y 2021 se produjeron 88 denuncias por acoso laboral o sexual, aunque no todas acabaron en sanción. Uno de los casos más llamativos es el de la eurodiputada luxemburguesa Monica Semedo (RenewEurope), que ha sido castigada por acoso en dos ocasiones. La primera fue en 2021 y la segunda acaba de suceder. La parlamentaria también ha cargado contra el procedimiento y ha anunciado que recurrirá a la Justicia.

El Comité Consultivo encargado de estudiar las quejas por acoso psicológico y sexual y de prevenir estos episodios en la institución europea tiene sobre la mesa otra denuncia contra un eurodiputado español: en este caso el expresidente de Baleares José Ramón Bauzá, a quien ha denunciado uno de sus asesores. El proceso comenzó el pasado verano, según informó El Confidencial. Ciudadanos ha eludido hacer comentarios sobre el asunto hasta que se produzcan las conclusiones de la Eurocámara.

Tras recibir las denuncias, el comité consultivo abre una investigación si considera que tiene pruebas suficientes. Después de escuchar las declaraciones del eurodiputado y de testigos de ambos lados, ese comité (formado por tres eurodiputados y dos representantes de los asistentes) eleva una recomendación a la presidenta del Parlamento Europeo, Roberta Metsola, que es a quien corresponde tomar una decisión final que comunica al Pleno.