Las investigaciones sobre la gigantesca trama china que presuntamente capitaneaba Gao Ping han arrojado datos sorprendentes, tal como vaticinó el propio ministro del Interior al estallar la operación. Entre los españoles identificados por la Policía como usuarios de la red de blanqueo el sumario cita a una pariente del rey que no pertenece a su círculo familiar directo, M. B. D.S. L., a otro aristócrata, a un miembro de una importante familia de promotores inmobiliarios, a otros prominentes empresarios y a un exdirectivo de Mario Conde, E.L.P.A., que, como él, acabó condenado a prisión en 2002 por el caso Banesto.
Camuflado en bolsas de plástico y en billetes de no más de 50 euros, el dinero se entregaba en metálico y a domicilio después de que sus destinatarios hubieran pagado una comisión a los empleados del emperador de Fuenlabrada. Sus nombres completos y sus domicilios constan en el sumario, cuyo secreto acaba de levantar el juez Fernando Andreu. Este diario aporta solo sus iniciales dado que no ha podido contactar con ninguno de los implicados para conocer su versión de los hechos.
El sistema funcionaba de forma sencilla y siguiendo las pautas de los primitivos bancos: el usuario de la red de blanqueo, poseedor a su vez de una cuenta en algún paraíso fiscal, cursaba a China una determinada cantidad mediante transferencia y desde la citada cuenta opaca. Una vez la trama verificaba in situ que el dinero había llegado al depósito localizado en China, descontaba su comisión –los investigadores creen que oscilaba entre el 1,5% y el 2,5%– y daba instrucciones a sus presuntos sicarios en España para que hicieran llegar el dinero en bolsas a sus destinatarios.
En España, la red utilizaba como correos a los miembros de la llamada subtrama hebrea, Malka Maman Levy y Rafael Pallardó. Pero quien controlaba en China que el cliente había cumplido enviando la transferencia acordada y avisaba a renglón seguido a Malka y Pallardón era el propio cuñado de Gao Ping, Yong Jung Yang, alias Weijun. Cuando, el 16 de octubre, el juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu lanzó la Operación Emperador, Weijun se encontraba en China. Y, presumiblemente, allí sigue, según las fuentes consultadas de la investigación.
Con ese método, conocido como hawala y utilizado desde hace muchos años por inmigrantes de países musulmanes, pero también por organizaciones como Al Qaeda, los titulares o beneficiarios reales de cuentas abiertas en países con legislación financiera opaca se garantizaban un doble objetivo: disponer de grandes cantidades y hacerlo sin que Hacienda se percatase de la existencia de cuentas con dinero negro.
En algunos casos, la Policía fotografió el momento de la entrega, como ocurrió con el empresario A.B.F., miembro de una conocida familia de constructores que dejó su sello en Marbella y quien, según la documentación incorporada al sumario, recibió 400.000 euros en tres entregas: una de 100.000 en marzo, otra de 200.000 en mayo y una tercera de 100.000 en septiembre. En el domicilio madrileño de A.B.F. nadie atendió el teléfono por la tarde ni por la noche.
No consta a este diario si el exdirectivo de Mario Conde E.L.P.A. fue fotografiado o no pero sí que habría cobrado, supuestamente, 250.000 euros mediante dos entregas, una de 50.000 en julio y otra de 200.000 en septiembre. Este diario intentó contactar con el bufete que tradicionalmente ha representado a E.L.P.A. Los abogados no accedieron a hablar con este diario.
Tampoco fue posible localizar a la aristócrata M.B.D.S.L, aunque este diario informó de su identidad a los portavoces oficiales de la Zarzuela por si resultaba posible entrar en contacto con ella. Los portavoces respondieron lo habitual: que los servicios de prensa de la Zarzuela nunca hacen de intermediarios entre los periodistas y los parientes del monarca que no pertenecen a la Familia Real.
Si las fotos se convertirán en prueba de cargo inequívoca, en otros casos, la clave llegó a través de las escuchas telefónicas a los principales protagonistas del caso. El nombre de la noble M. B.D.S.L. había aparecido en varias conversaciones. Pero no fue hasta una de las más recientes intervenidas cuando la conversación dio la clave sobre la verdadera identidad de la aristócrata.
Según las fuentes consultadas, ella recibió 30.000 euros en marzo, pero no fue ese el único pago de la trama. En 2004, esta conocida integrante de la más alta aristocracia española alcanzó cierta popularidad incluso entre quienes no frecuentan el papel couché ni las noticias sobre la jet española: fue una de las invitadas a la boda del príncipe de Asturias y Letizia Ortiz.
Otro aristócrata, F.B.O.Z.R., que ostenta un marquesado, figura también como receptor de dinero. En el sumario consta como acreditado un pago de 75.000 euros en abril, aunque las fuentes consultadas aseguran que hubo más entregas. F.B.O.Z.R. ganó cierta fama cuando, a finales de 207, vendió al Ministerio de Medio Ambiente un enclave de alto valor ecológico integrado en un parque nacional.
Hay un tercer miembro de la alta sociedad madrileña presuntamente involucrado y que habría traído a España con el sistema de hawala 500.000 euros. Este diario omite incluso sus iniciales ante la duda de si se trata del padre o el hijo, este último fallecido a finales de primavera.
Otros empresarios aparecen señalados por la Policía como destinatarios de pagos pero este diario no ha podido verificar sus identidades ni los fondos que recibieron. Salvo viraje extremo, lo previsible es que todos los españoles que se beneficiaron de la infraestructura delictiva de Gao Ping y su extensa red tendrán que desfilar ante el juez instructor del caso, Fernando Andreu.
Desde luego, a la luz de los nuevos datos cobra un sentido diferente el hecho de que la trama almacenara tal cantidad de dinero en metálico: porque los fondos –la Policía se incautó de 11,5 millones– no sólo viajaban hacia el extranjero sino que se quedaban en España para ser repartidos entre los clientes vip de la supuesta mafia.
El magistrado aborda ahora una fase delicada de la instrucción después de que la Sección Tercera de la Audiencia Nacional dictase el pasado 22 un auto que abre la puerta de la libertad a los 20 principales miembros de la organización, ahora presos. Anticorrupción presentó de inmediato un incidente de nulidad contra ese auto para impedir la excarcelación de Gao Ping y los suyos. Ayer, la Sección Tercera de la Audiencia rechazó de un plumazo la petición como ya había rechazado el Pleno en 2010 admitir la querella planteada por la misma fiscalía contra la trama china. Anticorrupción ha hecho un nuevo intento planteando un recurso de súplica contra el auto del día 22. Pero los cartuchos para mantenerlos en prisión se agotan.