Dos ministros de los gobiernos de José Luis Rodríguez Zapatero han protoganizado una polémica en las páginas de eldiario.es. La pelea surgió a raíz de un artículo del exministro de Industria, Miguel Sebastián, que, bajo el título 'Otra gran oportunidad perdida para el PSOE', criticaba la actuación del actal líder socialista, Alfredo Pérez Rubalcaba. En su texto, Sebastián tachaba de “desastre” el resultado del PSOE el debate sobre el estado de la nación y aseguraba que Rubalcaba ha errado al plantear una subida en el IRPF.
Sebastián sostenía basaba uno de sus argumentos en que “los economistas son contrarios a la IRPF”. En su respuesta, el exministro de Trabajo, Valeriano Gómez, recriminaba esta afirmación: “Siempre me ha parecido poco humilde y, ciertamente, muy presuntuoso pensar que las opiniones de uno son compartidas por el conjunto de la profesión”. En este sentido, el extitular de Empleo explica los aspectos positivos de las subidas de impuestos y critica que en el último cuarto del siglo las figuras impositivas hayan bajado, lo que, a su juicio, ha provocado que “el fraude fiscal no haya dejado de aumentar”.
Por su parte, Sebastián considera que el PSOE se cuentra “más cómodo en el discurso rancio de subir impuestos es de izquierdas” y lamenta que Rubalcaba “se muestre cada vez más incómodo con las políticas de Zapatero, como si no hubiesen sido suyas”.
Sin embargo, Gómez reniega de esas actuaciones: “Necesitábamos una política monetaria mucho más contractiva y en su ausencia la política fiscal adecuada no podía consistir en bajar impuestos. Pero así se hizo”, expresa.
Miguel Sebastián considera que, con el discurso contra la subida del IRPF planteada por el Gobierno, Rubalcaba “hubiera goleado cómodamente a Rajoy” y defiende que sería un “golpe demoledor”, que hubiera provocado también “una fisura dentro del PP”.
Valeriano Gómez también responde a los planteamientos en términos electoralistas de su excompañero: “Comprendo que para muchos, como Miguel Sebastián, las subidas de impuestos no sean movilizadoras. Pero estoy entre los que sufrieron un verdadero golpe de tos, seca y muy molesta, cuando escuchamos que ”bajar impuestos es de izquierdas“. Tan molesta que todavía no hemos encontrado alivio”, concluye.