El president de la Generalitat valenciana, Alberto Fabra, ha asegurado hoy que “no es el momento de la revolución sino de la evolución” y ha pedido no retroceder “ni un ápice a épocas superadas” o dejarse guiar por “sentimientos” que, según ha advertido, pueden conducir a “modelos de Estado fallidos”.
En el tradicional discurso de Fin de Año del president, emitido por segundo año consecutivo tras el cierre de Radiotelevisión Valenciana por la web de la Generalitat y en la desconexión territorial de La 1 de TVE, Fabra se ha comprometido a que durante el próximo año se crearán en la Comunidad Valenciana “entre 75.000 y 100.000 puestos de trabajo”.
“Así, al finalizar 2015 superaremos el 1.700.000 afiliados a la Seguridad Social, una cifra que no se conocía desde hace cinco años”, ha señalado antes de valorar que durante 2014 se hayan creado más de 51.000 nuevos empleos.
El año que acaba mañana, según Fabra, ha vivido “muchos cambios” que ha querido personalizar en Juan Carlos I, Felipe VI (“un rey joven y preparado”) y Adolfo Suárez (“un referente para todos de concordia y acuerdo”).
Del expresidente del Gobierno ha reivindicado, además, “su incansable espíritu por tender puentes” que “unan” en lugar de levantar muros que “separen”.
“En un país que aspira al progreso colectivo, las normas de convivencia hay que construirlas desde los consensos y nunca desde la ruptura”, ha defendido Fabra, quien pide “afianzar todo el progreso alcanzado desde la transición sin dar pasos en falso que puedan provocar justo lo contrario”.
A su juicio, para evolucionar como una sociedad “responsable y madura” se debe analizar “qué funciona adecuadamente y qué es necesario adaptar a los nuevos tiempos, sin que ello suponga tener que abrir un nuevo proceso constituyente cada tres o cuatro generaciones”.
En cuanto a la corrupción, Alberto Fabra ha reclamado que haya “gobernantes que adopten las medidas necesarias para acabar con la desafección entre los ciudadanos y sus representantes atajando, en especial, el problema de la corrupción”.
Para el president valenciano, ejemplaridad, buena gestión, participación y transparencia son “los pilares” sobre los que ha basado su acción de gobierno para intentar “recuperar la confianza en las instituciones y en las personas que de forma temporal” se dedican, como él, a “servir a los demás”.
El año que ahora acaba ha sido, en su opinión, “intenso en lo social, lo económico y lo político”, pero también donde “entre todos” se ha consolidado la recuperación económica.