Federico Trillo no quiere convertirse en un jubilado y ya ha tomado medidas para evitarlo. El exministro de Defensa acaba de solicitar permiso para prorrogar su estancia en el Consejo de Estado, ante la cercanía de su 65º cumpleaños. Trillo tiene derecho a pedir la prórroga y mantenerse en el puesto hasta los 70 años de edad. La decisión de conceder o no esa prórroga es responsabilidad del Consejo de Estado.
Fuentes oficiales del órgano consultivo confirman que “Trillo ha presentado la solicitud en los últimos días”. Ahora el Consejo de Estado tendrá que responder de manera razonada y exponer los motivos de su decisión: “La Administración Pública competente deberá resolver de forma motivada la aceptación o denegación de la prolongación”. Si su petición es aceptada, Trillo podría quedarse en el Consejo de Estado hasta los 70 años.
El exministro de Defensa forma parte del cuerpo de letrados del Consejo de Estado y tiene plaza fija en la entidad. Se da la paradoja de que un informe de este organismo fue el que acabó con la carrera política de Trillo y supuso su cese como embajador en Londres, provocando su retorno al Consejo de Estado. El informe responsabilizaba a Defensa del accidente del Yak-42 y tuvo como consecuencia la decisión del Gobierno de pedir perdón a las víctimas por lo sucedido.
Los familiares de los fallecidos en el accidente del Yak-42 han manifestado al Gobierno que “Trillo no tiene la dignidad necesaria” para el puesto en el que quiere mantenerse por encima de la edad de referencia para la jubilación.
En medio de la polémica suscitada, el Partido Popular aseguró que no está en su mano retirar a un funcionario de un puesto al que tiene derecho. Con la petición de prórroga las cosas cambian, ya que será el Consejo de Estado el que tendrá que tomar una decisión sobre el futuro laboral de un Federico Trillo que no quiere convertirse en jubilado.