Los partidos huyen de las crisis internas como de la peste. A veces, vienen bien si dan lugar a una reconciliación. No importa que pueda ser más falsa que un duro de madera o que sea prácticamente forzada por las circunstancias. La escena de 'nos amaremos para siempre y nunca te abandonaré' es impagable. El público dice 'ooooh' y se rompe las manos aplaudiendo. Los titulares destacan el amor verdadero. Las fotos son maravillosas y las sonrisas no pueden ser más sinceras.
La convención del Partido Popular celebró su penúltimo día en Valencia, aunque en realidad parecía que se trataba de la jornada clave que todos estaban esperando o temiendo, y eso que no intervenía Pablo Casado. El plato fuerte era la aparición de los seis presidentes autonómicos del PP. Entre ellos estaba Isabel Díaz Ayuso, de vuelta de su gira fantástica por Estados Unidos, donde se fotografió delante del Capitolio, dio una entrevista con la Casa Blanca de fondo y se reunió con unas pocas personas que nunca habían oído hablar de ella.
Una crónica de Iñigo Sáenz de Ugarte.
Junto a las palabras España y libertad, quizá el nombre propio que más se ha reproducido este domingo en la plaza de toros de Valencia ha sido el de Rita Barberá. Las referencias a la excalcaldesa, a la que el partido reclamó apartarse por su investigación judicial en el caso Taula, han sido una constante que ha logrado encender al público en el cierre de la convención nacional del PP.
Las gradas se ponían en pie y explotaban en aplausos cada vez que un dirigente popular hacía mención a Barberá, una oportunidad que prácticamente todos los ponentes han explotado. Especialmente Maria José Catalá, portavoz del PP en el Ayuntamiento de Valencia y aspirante a alcaldesa, que ha asegurado que la dirigente, fallecida en 2016, “convirtió a Valencia en la mejor ciudad del mundo”. La ciudad “necesita la mano de una mujer”, ha insistido, echando mano de las políticas de Barberá, que se mantuvo en la alcaldía dos décadas.
Lo cuenta Laura Martínez.
El expresidente de la Generalitat Valenciana Francisco Camps ha asegurado al abandonar la convención que ha disfrutado del acto del PP en la plaza de toros y vaticina que vienen “nuevísimos tiempos” para el partido y la comunidad autónoma.
Camps se ha mostrado entusiasmado a la salida de la convención nacional que celebra el partido en Valencia y ha elogiado un discurso “espectacular” de Pablo Casado en el terreno que dio a los populares sus últimas victorias electorales.
La salida de los líderes del PP ha provocado una pequeña aglomeración de simpatizantes a las puertas del recinto taurino para reclamar fotografías. Por la puerta principal han abandonado el coso Casado, Isabel Díaz Ayuso o Carlos Mazón, con la presidenta madrileña como principal reclamo para el público, que ha pillado al dispositivo policial algo desprevenido, provocando algún parón de tráfico ante las agrupaciones de militantes.
Lo cuenta Laura Martínez.
Eliminar impuestos; privatizar empresas y servicios; derogar las leyes de Memoria Democrática, trans, o Celaá; promocionar la maternidad y dificultar el aborto; cerrar fronteras, reclamar la españolidad de Gibraltar y alojar en Rota y Morón la VI Flota de EE UU; encarcelar a los piquetes, imponer el castellano en las aulas; prohibir partidos y asociaciones; convertir los referéndum en delitos e introducir la rebelión sin violencia en el Código Penal. Y Monarquía. Pablo Casado ha expuesto este domingo en el cierre de la Convención Nacional su programa para hacerse con el poder y que el PP regrese a la Moncloa. El PP de siempre, con las propuestas de siempre y los eslóganes de siempre.
“Hemos recuperado el liderazgo del espacio electoral del centro derecha. Los que vinieron a sustituirnos se han ido quedando por el camino. El PP es mucho PP. La elección no es entre nueva y vieja política, sino entre buena y mala política. Somos la única alternativa de futuro y esperanza para España”. Así ha proclamado este domingo Pablo Casado el liderazgo del partido que dirige hace tres años en una plaza de toros de Valencia que ha completado el aforo permitido, de 9.000 personas, y en cuyos aledaños se han quedado cientos de militantes sin poder entrar.
Escribe Aitor Riveiro.
“Bienvenidos a Valencia, la ciudad donde ya no se roba”. Compromís proyecta a la entrada del acto de clausura de la convención del PP imágenes que ilustran sus casos de corrupción, con los llamados 'papeles de Bárcenas' como principal exponente.
La coalición valencianista, que posee la alcaldía de la ciudad con Joan Ribó a la cabeza, ha ubicado en un espacio comercial varias imágenes de los casos de corrupción, donde ha recordado las palabras de Teodoro García Egea sobre el pasado de la ciudad. “Valencia debe volver a ser lo que era”, dijo el secretario general en la visita a los preparativos del acto en la Plaza de Toros.
Escribe Laura Martínez.
El presidente del PP, Pablo Casado, ha logrado llenar la plaza de toros de Valencia en el cierre de la Convención Nacional con la que el partido busca relanzar su proyecto ante el próximo ciclo electoral. Unas 9.000 personas, según los organizadores, completan el aforo del recinto, donde el PP ha celebrado históricamente grandes mítines.
Centenares de personas se han quedado sin acceder al recinto. Casado, junto al presidente del PP de Valencia, Carlos Mazón, y la líder del partido en la ciudad, María José Catalá, se ha dirigido a los simpatizantes en el exterior de la plaza.
Quien sí ha entrado ha sido la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, quien ha recibido un fuerte aplauso del público, después de haber sellado una tregua con la dirección nacional en la guerra abierta por el control del partido en la región. Un acto de contrición que permitió a Casado salvar 'in extremis' la convención y dar una imagen de unidad.
Informan Aitor Riveiro y Laura Martínez.
Los partidos huyen de las crisis internas como de la peste. A veces, vienen bien si dan lugar a una reconciliación. No importa que pueda ser más falsa que un duro de madera o que sea prácticamente forzada por las circunstancias. La escena de 'nos amaremos para siempre y nunca te abandonaré' es impagable. El público dice 'ooooh' y se rompe las manos aplaudiendo. Los titulares destacan el amor verdadero. Las fotos son maravillosas y las sonrisas no pueden ser más sinceras.
La convención del Partido Popular celebró su penúltimo día en Valencia, aunque en realidad parecía que se trataba de la jornada clave que todos estaban esperando o temiendo, y eso que no intervenía Pablo Casado. El plato fuerte era la aparición de los seis presidentes autonómicos del PP. Entre ellos estaba Isabel Díaz Ayuso, de vuelta de su gira fantástica por Estados Unidos, donde se fotografió delante del Capitolio, dio una entrevista con la Casa Blanca de fondo y se reunió con unas pocas personas que nunca habían oído hablar de ella.
Una crónica de Iñigo Sáenz de Ugarte.
El expresidente de la Generalitat Valenciana Francisco Camps acude al cierre de la Convención Nacional del PP en la Plaza de Toros de Valencia. Camps, con una causa pendiente por corrupción, ha llegado pasadas las 10.40 de la mañana de este domingo al coso, donde el partido ha congregado a varios miles de personas, con un aforo estimado de 9.000 asistentes.
El expresidente popular, que dimitió con una causa abierta por corrupción que fue archivada -el llamado caso de los trajes- no acudía a un mitin de los 'populares' desde que dejó la el Palau de la Generalitat hace diez años.
Camps ha destacado que ve el “mismo ambiente de alegría, ilusión y esperanza” entre los militantes congregados en la Plaza que veía hace diez años. “Tenemos que estar aquí en la plaza apoyando a Pablo Casado hacia la presidencia del Gobierno y a Carlos Mazón a la presidencia de la Generalitat”. Los populares no organizaban un acto en el coso valenciano desde 2015, con Mariano Rajoy, Alberto Fabra y Rita Barberá.
El canciller de Austria, Sebastian Kurz, ha mantenido esta noche una conversación telefónica con el presidente del PP, *Pablo Casado*, en la que le ha comunicado que le enviará un video de apoyo al acto de clausura de la convención nacional ante la imposibilidad de acudir a la plaza de toros de Valencia por las negociaciones que está llevando su formación política para sacar adelante los Presupuestos de su país, y que requieren su presencia, lo que le obliga a permanecer este domingo en Viena.
“Lamento sinceramente que, con tan poca antelación, debido a las actuales negociaciones presupuestarias en Austria, no me sea posible estar con vosotros en Valencia”, ha trasladado el canciller austriaco al líder del PP.
Sin embargo, para suplir esta ausencia, enviará un video de apoyo agradeciendo la invitación, que se emitirá durante el acto de clausura. Una fórmula, la del mensaje grabado, que el PP no permitió utilizar a Isabel Díaz Ayuso el pasado miércoles, cuando la convención itinerante recaló en Madrid, mientras la presidenta autonómica se encontraba en Estados Unidos.
Por Aitor Riveiro.
La presidenta del PP de Lugo, Elena Candia, ha reclamado a sus compañeros de partido incrementar la presencia femenina en su representación política e institucional. Sin referencia a cuotas u otros mecanismos de corrección, la presidenta provincial ha expresado en su breve intervención ante Pablo Casado “una petición, que en la próxima convención seamos más mujeres”, que ha recibido un caluroso aplauso por parte del público.
La reivindicación de la también diputada autonómica en el parlamento gallego llega varios días después de la sonada intervención de una ponente, Paula Gómez de la Bárcena, que en una mesa sobre feminismo en la convención popular afeó la falta de mujeres en primera línea en otras mesas. “Si no lo digo, reviento. ¡En esta convención hay menos representantes femeninas que en cualquier consejo de administración del IBEX! ¡Buscadlas, por Dios, las hay, están!”, apuntó la empresaria.
Lo cuenta Laura Martínez.
A las 12.30 comenzaban a repicar las campanas del Santuari de Nostra Senyora de Montolivet, situado frente del Palau de les Arts de Valencia que acoge la penúltima jornada de la Convención Nacional del PP. En ese preciso momento se abría la puerta de la furgoneta negra y con lunas tintadas que traía a la presidenta de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, al cónclave con el que Pablo Casado quiere relanzar su proyecto ante el próximo ciclo electoral. Ayuso ha llegado la última. Literalmente, ha sido la última persona en acceder al auditorio donde un millar de personas asistía a las intervenciones programadas desde las 10 de la mañana. Una nube de periodistas y cámaras han rodeado a la presidenta madrileña mientras dentro hablaba el ex secretario general de la OTAN, Anders Rasmussen.
Entre gritos de “¡presidenta, presidenta!”, Ayuso ha pasado de largo ante el set preparado para las declaraciones de los asistentes y donde sí se han detenido, antes que ella, el resto de presidentes autonómicos del partido. Todos han tenido que responder a la prensa sobre la pugna abierta entre Casado y Ayuso, quien ha acaparado todos los focos de la mañana del sábado.
Escriben Aitor Riveiro y Laura Martínez.