La Audiencia Nacional acaba de dictar la apertura de juicio oral contra el líder de Def con Dos, César Strawberry. En el escrito de acusación, la Fiscalía del tribunal especial solicita para el artista 20 meses de cárcel, ocho años de inhabilitación absoluta y dos de libertad vigilada por un delito de enaltecimiento del terrorismo y humillación a las víctimas, contenido presuntamente en seis comentarios en Twitter y un retuit lanzados por el artista desde su cuenta en la red social entre noviembre de 2013 y julio de 2014.
En el brevísimo escrito de acusación, de apenas tres páginas, el fiscal Carlos Bautista enumera los mensajes susceptibles de constituir el delito de enaltecimiento, castigado con hasta dos años de cárcel, según el Código Penal vigente en el momento de los hechos. Junto a ellos realiza las interpretaciones que considera demuestran la culpabilidad de César Montaña Lehman, conocido artísticamente como César Strawberry.
El caso más paradigmático es el del retuit. A pesar de que hacer RT a mensajes de otros usuarios no significa mostrar apoyo o conformidad con los mismos -una norma no escrita en Twitter, pero asumida por sus 300 millones de usuarios en todo el mundo-, el fiscal Bautista insiste en que Strawberry lo “reprodujo, haciendo suyo el contenido”.
“¿Se puede llevar una camiseta con un estampado de Miguel Ángel Blanco? Lo pregunto desde el respeto y el verano”. Este es el mensaje retuiteado por el acusado el 17 de julio de 2014 y cuyo autor original no ha sido perseguido. Según la interpretación del fiscal Bautista, el cantante hacía referencia al asesinato del que fuera concejal del PP en Ermua y “a las manchas de sangre en la ropa”.
Dos de los tuits de Strawberry que le llevarán al banquillo haen alusión al penúltimo presidente de la dictadura franquista, Luis Carrero Blanco. “Franco, Serrano Suñer, Arias Navarro, Fraga, Blas Piñar… Si no les das lo que a Carrero Blanco, la longevidad se pone de su lado”, escribió el 29 de enero de 2014. Para el fiscal, el acusado hizo “loa al asesinato” del que cita como “almirante Carrero Blanco”, al tiempo que hace de ese tipo de atentado “su solución preferida para otras personas”. Un mes antes, Strawberry había escrito en Twitter: “Cuantos deberían seguir el vuelo de Carrero Blanco”, según consta en el escrito que adelantó Vozpopuli.com.
En el auto de apertura de juicio oral, al que ha accedido eldiario.es, el juez José de la Mata recuerda que él archivó la causa contra el artista al no apreciar indicios de delito, pero que la Sala de lo Penal estimó el recurso de la Fiscalía y que debe, por tanto, enviar la causa a juicio. En aquel recurso, el fiscal Bautista se lanzaba contra el juez y le acusaba de “cometer un cierto fraude procesal” y de estar “menos capacitado que el lector medio” por no apreciar delito en los tuits de Strawberry.
Después de tomar declaración a Strawberry, el juez De la Mata había concluido que, lejos de ensalzar a organizaciones terroristas, “en realidad, lo que revela el patrón de comportamiento de esta persona es aparentemente lo contrario”. “Lo acreditado es que, desde su particular concepción del arte, el imputado ha mostrado en público su compromiso social con distintas causas, expresándose siempre, eso sí, desde una estética provocadora, irónica y sarcástica, buscando generar en los receptores perturbación, disconformidad o escándalo”, añadía el magistrado.
Madina no se sintió vejado
Como ocurrió con Irene Villa y el concejal de Ahora Madrid Guillermo Zapata, el cantante César Strawberry fue exculpado por una de las víctimas a las que supuestamente humillaba: “Street Fighter, edición post ETA: Ortega Lara versus Eduardo Madina” es el contenido del mensaje en cuestión. Madina fue preguntado en un acto público si se sintió menospreciado y contestó. “No, me decepcionó, me parece una mierda de chiste, pero no, para nada”. Según Bautista, el mensaje invoca “de manera despreciativa las secuelas psíquicas y físicas que ambos sufrieron a manos de la organización terrorista ETA”.
El funcionario de prisiones José Antonio Ortega Lara protagoniza otro de los comentarios recogidos en el escrito de acusación: “A Ortega Lara habría que secuestrarle ahora”, escribió el 27 de enero de 2014 César Strawberry en su cuenta de Twitter. Ante el juez y en declaraciones a los medios, Strawberry explicó que se refería a Ortega Lara como un adversario político de “extrema derecha” y no a una víctima de la banda. Similar argumento utilizó para referirse al tuit “El fascismo sin complejos de Esperanza Aguirre me hace añorar hasta los GRAPO”.
Carlos Bautista es uno de los máximos colaboradores del fiscal jefe de la Audiencia Nacional, Javier Zaragoza, en su estrategia de derivar gran parte de los esfuerzos del Ministerio Públio a perseguir delitos de enaltecimiento, especialmente a través de las redes sociales. Se da la circunstancia de que Bautista tuvo que pedir disculpas públicas cuando fue descubierto burlándose de compañeros de la Audiencia Nacional e insultando a la Guardia Civil desde una cuenta de Twitter tras la que ocultaba su identidad.
La Fiscalía también impulsó que el concejal de Ahora Madrid Guillermo Zapata esté a punto de sentarse en el banquillo. Como con Strawberry, el juez de instrucción –en su caso Santiago Pedraz- archivó el caso, pero Dignidad y Justicia y el Ministerio Público recurrieron y la Sala de lo Penal les dio la razón. El pasado sábado, el órgano que dirige Javier Zaragoza solicitó prisión incondicional para dos titiriteros por haber presuntamente enaltecido el terrorismo y cometido un delito contra las libertades durante una representación de guiñoles. El miércoles, la Fiscalía rectificó y pidió su excarcelación.