Los principales actores de la investigación de la trama Gürtel no se atreven a fijar una fecha de celebración para el primer gran juicio del caso, seis años después de que estallara. Los más optimistas hablan del próximo otoño, con una foto de Luis Bárcenas y otra veintena de antiguos cargos del partido sentados en el banquillo de los acusados, mientras el representante legal del PP y la exministra Ana Mato serían ubicados un poco más atrás, como sospechosos de haberse beneficiado a título lucrativo de los manejos de la red de Francisco Correa.
En la vista se determinarán responsabilidades por la trama de corrupción entre los años 1999 y 2005, sin que la financiación irregular del partido centre el juicio. Sin embargo, la investigación de la 'caja B' del partido estará presente en todo momento. La Fiscalía, en su escrito de acusación, acusa a Bárcenas y Lapuerta de distraer fondos del partido, concretamente de “una contabilidad paralela o caja B del PP”.
En la página 136 -de las 507 que tiene el escrito de acusación- las dos fiscalas Anticorrupción aseguran que los fondos sustraídos procedían de “la contabilidad paralela o caja B del Partido Popular, gestionada por ambos acusados y que se nutría, con carácter general, de donativos que incumplían la normativa de financiación de partidos políticos y que eran efectuados por personas relacionadas con entidades beneficiarias de importantes adjudicaciones públicas”.
Las fiscalas Concepción Sabadell y Concepción Segura coinciden con el Partido Popular en que Bárcenas se aprovechó del cargo que tenía en la formación para conseguir dinero negro, pero con una importante salvedad: si pudo hacerlo fue porque aprovechó “la evidente opacidad que ofrecía la doble estructura contable creada por el Partido Popular, dentro de su caja B”. Esos fondos, remarcan las fiscales, “no eran declarados a la Hacienda Pública ni al Tribunal de Cuentas”.
Bárcenas se llevó, “como mínimo”, 299.650,01 euros de la 'caja B' del PP entre febrero de 1993 y junio de 2008, durante su etapa de gerente. Entonces era tesorero Álvaro Lapuerta, que consintió esa sustracción, según la Fiscalía.
Bárcenas se enfrenta a 42 años de cárcel por estos y otros hechos que suman seis delitos. Lapuerta, solo a tres años. Ambos, concluye Anticorrupción, gestionaban la caja fuerte y secreta del partido de Mariano Rajoy.
En este capítulo del escrito se describe cómo el PP contribuyó con dinero negro al crecimiento de Libertad Digital, el medio que preside en la actualidad Federico Jiménez Losantos, y que en la primera legislatura de José Luis Rodríguez Zapatero fue abanderado de la teoría de la conspiración en los atentados islamistas del 11M. En total, más de 400.000 euros de dinero procedente de comisiones destinados a adquirir acciones del medio conservador.
El juez Pablo Ruz continúa investigando la financiación irregular del Partido Popular en la pieza separada que se conoce como los 'papeles de Bárcenas'. En ella están imputados también Bárcenas, Lapuerta y Ángel Sanchís, los tres tesoreros del PP en las últimas dos décadas para los que las fiscales Anticorrupción solicitan un total de 53 años y medio de cárcel en su escrito de acusación del 'caso Gürtel Primera Época'. Anticorrupción asegura que el PP se lucró con 328.440 euros de la trama. Ana Mato, con 28.468 euros.