La Fiscalía Anticorrupción ha recurrido hoy el archivo por el juez Diego de Egea de la investigación contra el excomisario del aeropuerto de Barajas Carlos Salamanca por recibir dádivas a cambio de visados irregulares alegando que hay indicios de delito contra él y aún quedan diligencias por practicar.
El juez de la Audiencia Nacional sobreseyó de oficio el pasado miércoles estas imputaciones contra Salamanca, detenido en noviembre en la operación Tándem junto al también excomisario José Manuel Villarejo y que fue ya investigado por la Operación Emperador, donde también se archivó su caso.
Al no ver suficientes indicios de delito, De Egea archivó la semana pasada su participación en la pieza del caso Villarejo sobre regalos y dádivas que recibió supuestamente a cambio de dar visados de forma irregular y arbitraria a ciudadanos guineanos, aunque, según la Fiscalía, aún está imputado de un delito de cohecho en la pieza principal.
El recurso, han informado a Efe fuentes fiscales, se ha presentado directamente ante la Sala de lo Penal de la Audiencia y en él la Fiscalía detalla los indicios contra Salamanca, que según Anticorrupción formaba parte de la organización criminal de Villarejo como subordinado de éste y le conseguía clientes.
La pieza contra Salamanca por los visados guineanos se sustenta en la declaración de otro imputado en ella, Francisco Menéndez, quien dio supuestamente los regalos a Villarejo por conseguir los permisos para sus clientes guineanos.
Pero para la Fiscalía este no es el único indicio contra él, sino que en la causa figura un pago de Menéndez a Villarejo en el que Salamanca actuó supuestamente como intermediario.
Aparte de defender los indicios contra Salamanca como miembro de la red de Villarejo y recordar que sigue investigado de cohecho en la pieza principal por cuatro coches que recibió de éste por otros servicios, la Fiscalía alega que es una decisión “extemporánea” porque se produce demasiado pronto.
Recuerda Anticorrupción que aún hay varias diligencias pedidas por el propio juez sobre Salamanca, como el análisis de la información de su teléfono móvil o un informe sobre su patrimonio, por lo que habría que esperar a esos resultados antes de tomar una decisión así.
Para la Fiscalía, hay asimismo mucha información incautada en la causa que aún está siendo analizada y que podría afectar a Salamanca, como conversaciones que le relacionan con el comisario imputado Enrique García Castaño, por lo que cabe que se vaya incorporando a la pieza de los ciudadanos guineanos a medida que se vaya conociendo.
También recuerda al juez que esta pieza se acordó solo por delitos de cohecho, referidos únicamente a estos presuntos regalos a Salamanca, y contra los ciudadanos extranjeros y que en ella solo aparecen como imputados Salamanca y Menéndez.
Sin embargo, destaca que en su auto de archivo el juez se refiere a otros delitos de la pieza principal (organización criminal y blanqueo) y a dos personas que están figuran investigadas en la principal pero no en la separada: la mujer y el hijo de Salamanca, investigados por blanqueo.
El juez decidió archivarla porque no vio indicios, más allá de la declaración de Menéndez, de que Salamanca recibiera dádivas por visados irregulares, acogiendo la versión de este excomisario de que esos regalos eran en calidad de la amistad que les unía.
En este sentido, la Fiscalía se pregunta en el recurso por qué el juez exonera al supuestamente corrompido, Salamanca, y no al corruptor, Menéndez, quien sigue imputado en la pieza.
En el recurso de apelación presentado por la Fiscalía, que recaerá en la sección tercera de la Sala de lo Penal de la Audiencia, también se pide el mantenimiento de las medidas cautelares que le había impuesto el juez de comparecencias ante el juzgado, prohibición de salida de España y retirada del pasaporte.
Este es el segundo recurso que ha interpuesto la Fiscalía en los últimos días contra decisiones de De Egea, después de que el pasado viernes recurriera, también ante la Sala de lo Penal, la puesta en libertad el viernes anterior del comisario Enrique García Castaño, que fue detenido dos días antes como supuesta mano derecha de Villarejo.