La portada de mañana
Acceder
Sánchez rearma la mayoría de Gobierno el día que Feijóo pide una moción de censura
Miguel esprinta para reabrir su inmobiliaria en Catarroja, Nacho cierra su panadería
Opinión - Cada día un Vietnam. Por Esther Palomera

Noticia servida automáticamente por la Agencia EFE

La Fiscalía pide 4 años para un exdirectivo de la SGAE que gastó 40.000 euros en locales de alterne

EFE

Madrid —

0

La Fiscalía ha pedido 4 años y 10 meses de prisión para el exdirector de Relaciones Corporativas de la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE) Pedro Farré López por haber cargado en la tarjeta de la entidad 40.000 euros correspondientes a gastos “estrictamente particulares en locales de alterne”.

El fiscal anticorrupción José Miguel Alonso Carbajo pide en un escrito al juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz que abra juicio oral contra Farré y contra el ex director financiero de la SGAE, Ricardo Azcoaga, para quien reclama 2 años y medio de cárcel.

La Fiscalía acusa a Farré de los delitos de apropiación indebida y falsedad en documento mercantil y asegura que desde el 13 de noviembre de 2008 hasta el 15 de mayo de 2009, “para procurarse un beneficio ilícito a costa” de la SGAE, usó la tarjeta “Visa Corporate Oro” de la entidad en varios locales de alterne.

En el escrito, el fiscal detalla los gastos que el exdirectivo cargó a la tarjeta de la SGAE, correspondientes a tres prostíbulos de Madrid, Alcalá de Henares y Coslada.

Farré presuntamente gastó dinero de la entidad durante cada uno de los meses comprendidos entre noviembre de 2008 y mayo de 2009, en cantidades que van desde los 3.253 hasta los 8.536 euros mensuales.

Concretamente, el fiscal le atribuye haber usado la tarjeta visa de la SGAE para sufragar 3.541 euros en tres días diferentes del mes de noviembre de 2008, 7.775 euros en siete días de diciembre, 3.253 euros en seis días de enero de 2009, 8.536 euros en ocho días de febrero, 5.828 euros en siete días diferentes del mes de marzo, 5.669 euros en ocho días de abril y 4.949 en otros ocho de mayo.

Las cantidades que gastó cada noche varían desde los 67 a los 2.189 euros, según el escrito del representante del ministerio público, que también le pide que devuelva a la SGAE el dinero gastado en los locales en concepto de indemnización.

Asegura que, ya que los bancos no instalan cajeros en este tipo de locales, los cargos efectuados solo se pueden atribuir a que Farré pagó con la tarjeta directamente en el establecimiento y por diferentes conceptos, como “consumiciones y alojamiento con chicas”.

Destaca que pretendió además enmascarar los pagos, por que los locales a los que acudía pertenecen a sociedades cuyos nombres -que eran los que aparecían en los cargos a la tarjeta- “no eran sugerentes del tipo de servicio prestado a cambio”.

Para ello, elaboró y presentó al departamento de contabilidad de la entidad diez recibos “completamente inveraces” a nombre de una sociedad limitada y en los que hacía constar como concepto la palabra “catering”, añadiendo su firma y unas palabras manuscritas para justificar el gasto y que completaba con los recibos auténticos del pago con la tarjeta.

El fiscal recuerda que Farré dejó su cargo “por despido” el 19 de mayo de 2009, cuatro días después del último cargo a un club de alterne, y que en esa fecha recibió 62.974 euros en concepto de finiquito (53.000 de ellos como indemnización).

A Ricardo Azcoaga, que deberá restituir el dinero solidariamente con Farré, el fiscal le pide 2 años y medio de prisión por el delito de apropiación indebida como cooperador necesario o, alternativamente, 2 años y medio por el de encubrimiento.

El fiscal explica que, como director financiero de la SGAE y máximo responsable del área de control de gastos, Azcoaga ordenó que se trasladaran las cantidades no justificadas de Farré a una cuenta de “gastos sin justificar”.

Además, indica que “omitió cualquier actuación, ya directamente con el afectado, ya a través de los principales directivos de la entidad de gestión o de los órganos correspondientes” de la SGAE, para que se le reclamara legalmente el dinero no justificado y se le quitara la tarjeta de crédito.