El delegado del Gobierno en Ceuta, Francisco Antonio González, ha dicho que la instalación de las concertinas en los perímetros fronterizos de Ceuta y de Melilla son “aceptadas por Europa” al tratarse de elementos “disuasorios”.
En declaraciones a los periodistas, el delegado del Gobierno se ha referido a las numerosas críticas que ha provocado la instalación de estos elementos en Melilla mientras que en el caso de Ceuta hace ya varios años que están colocadas en los 8,2 kilómetros de perímetro fronterizo terrestre.
Francisco Antonio González ha dicho que “los famosos elementos persuasivos” generan “disuasión” para que no se produzcan entradas a lo largo del paso fronterizo.
El delegado del Gobierno ha considerado que en este caso no se puede hablar de trampas “sino de elementos disuasorios que son aceptados por Europa, pese a que hubo un malentendido”.
En su opinión, el problema no son las personas que huyen del hambre y de la guerra sino de las mafias que “los manejan e impulsan a arriesgar su vida y, además, sin ningún tipo de escrúpulos”.
Por este motivo, ha reconocido que “no es la primera vez” que los inmigrantes han sido abandonados “a su suerte” en barcas, barcos o pateras, que no tenían “la más mínima condición” de flotabilidad en aguas del Estrecho de Gibraltar.
“A las mafias les da igual pero a nosotros sí nos afectan estas situaciones porque tenemos el concepto y el valor de la vida en una altísima estima”, ha añadido.