Pedro Sánchez ha elegido a Juan Carlos Campo, exministro de Justicia, y a Laura Díez, exdirectora general en Moncloa, como los dos magistrados que le corresponde proponer para el Tribunal Constitucional, según ha adelantado El País y ha confirmado elDiario.es. El Consejo de Ministros realizará los nombramientos este martes.
El Tribunal Constitucional está formado por 12 magistrados. El mandato de cuatro de ellos expiró el pasado 12 de junio y su renovación corresponde tanto al Ejecutivo, que debe proponer a dos candidatos, como al Consejo General del Poder Judicial, que debe proponer a otros dos. Hasta ahora el Gobierno había decidido no nombrar a los que le correspondían hasta que el Poder Judicial no propusiese a su vez a los suyos.
Pedro Sánchez eligió a Campo como ministro de Justicia en enero de 2020. El Consejo General del Poder Judicial le adjudicó, en diciembre de 2019, una plaza en la Sección Tercera de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional, cargo que no llegó a ocupar hasta su salida del Ministerio e incorporación en septiembre de 2021. Juez desde 1987, Juan Carlos Campo entró en política una década después en la Junta de Andalucía y fue nombrado en 2001 vocal del Consejo General del Poder Judicial.
Laura Díez es catedrática de derecho constitucional por la Universidad de Barcelona desde enero de 2020, centro en el que ha ejercido varios altos cargos, ejerciendo como docente desde 1992 en el ámbito del derecho. Fuera de la universidad ha sido directora general de Asuntos Constitucionales y Coordinación Jurídica del Ministerio de la Presidencia entre 2020 y 2022, así como previamente directora del Gabinete del secretario de Estado de Relaciones con las Cortes del Ministerio de la Presidencia entre 2018 y 2020. Previamente, entre 2002 y 2004, fue asesora en la Generalitat para la reforma del Estatuto de Cataluña y en la actualidad es vicepresidenta del Consejo de Garantías Estatutarias del Parlament de Catalunya.
Una renovación bloqueada en el CGPJ
El Tribunal Constitucional tiene a cuatro de sus miembros con el mandato caducado desde el pasado mes de junio, los dos que fueron designados por el Gobierno de Mariano Rajoy y los dos que fueron designados por el Consejo General del Poder Judicial. Son el presidente Pedro González-Trevijano, el vicepresidente Juan Antonio Xiol y los magistrados Santiago Martínez-Vares y Antonio Narváez. Tres de ellos son del considerado sector conservador del tribunal de garantías y su renovación es clave para que cambie la correlación de fuerzas del pleno y exista una mayoría progresista.
Se trata de una renovación que, por el momento, está parcialmente bloqueada por una parte del sector conservador del propio CGPJ, que con el mandato caducado desde hace casi cuatro años dilata la obligación legal de designar a su candidato allí donde el sector progresista ya ha puesto encima de la mesa el nombre de José Manuel Bandrés, juez del Tribunal Supremo, para entrar en el Constitucional. Los vocales han mostrado su “plena disposición” a cerrar estos nombramientos el 22 de diciembre, casi dentro de un mes, aunque la primera reunión de esta comisión negociadora es mañana.
Desde hace meses el ejecutivo se ha mostrado confiado en poder renovar por su cuenta a los dos magistrados que le corresponden mientras el CGPJ sigue intentando nombrar a sus dos candidatos. El tribunal de garantías está pendiente de renovación en un momento en el que tiene varios asuntos clave pendientes de resolución, entre ellos el recurso presentado por el PP contra la ley del aborto hace más de una década.