Pedro Sánchez ha sufrido su primera derrota en el Congreso apenas doce horas antes de comparecer para explicar las líneas generales de su acción de Gobierno. Dos supuestos errores en una votación y dos ausencias han tumbado la renovación del Consejo de Administración interino de RTVE y evidencian la debilidad parlamentaria del Ejecutivo socialista.
El PSOE, tras un laborioso proceso de negociación, logró los votos necesarios –176 en los que está establecida la mayoría absoluta– y tres extra para sacar adelante la renovación de RTVE. En el recuento de este lunes en el Congreso han fallado cuatro. “Si no ha salido la votación de hoy, ha sido por un error humano, por un fallo”, ha concedido la portavoz del PSOE, Adriana Lastra, que ha recordado que contaba, en principio, con un acuerdo “de muchos grupos, de la mayoría absoluta del Congreso”. La supuesta equivocación tiene que ver con dos papeletas con el nombre del aspirante a presidente de RTVE metidas en una urna donde no se le elegía a él sino a los consejeros de la corporación pública.
Moncloa evita pronunciarse tras el primer varapalo que sufre en la Cámara Baja y se limita a la búsqueda de una solución puesta en marcha por el Grupo Socialista a través de los letrados del Parlamento: “Si no hay solución, se aplica el decreto ley y se propone un administrador único”, dicen las fuentes oficiales.
Sin embargo, diputados socialistas reconocen que la derrota del Ejecutivo subraya las dificultades para sacar adelante otras iniciativas por la dependencia continua de otros grupos. “Pone de manifiesto la debilidad del Gobierno”, admitía un destacado parlamentario del PSOE poco después de la votación.
Desde la dirección del partido intentan restar importancia al fiasco parlamentario. “Aunque hoy nos han fallado algunos votos, 175 diputados apoyaron esta votación, que hubieran sido 179 si hubiéramos estado todos y dos no se hubieran equivocado –ha afirmado Lastra–. Mayoría absoluta la hay para esto y para otras muchas cosas. Nos ha fallado un voto para llegar a la mayoría absoluta”, ha recalcado.
En las filas socialistas habían saltado las alarmas al filo de las 18 horas, después de que Ana Pastor anunciara que el resultado de la votación daba al traste con el proceso de renovación de RTVE y lo encaminaba a un administrador único que ahora deberán volver a negociar los socialistas con el resto de grupos. A la persona elegida le tocará pilotar la corporación pública hasta que un concurso nombre a una dirección definitiva. Unidos Podemos intentó buscar una segunda votación para enmendar la supuesta equivocación de dos diputados cuyo nombre y partido se desconocen. Los servicios jurídicos de la Cámara emitirán un informe en las próximas horas pero fuentes de la presidencia del Congreso aseguran que no cabe la convocatoria de un nuevo Pleno para votar otra vez a los consejeros y al presidente de la Corporación.
En el PSOE dan por hecho que esa es la solución que establece el decreto aprobado por el Consejo de Ministras hace ya casi un mes, aunque aseguran que están en comunicación con los letrados del Parlamento y con el resto de grupos.
Por su parte, Unidos Podemos espera al informe de los letrados porque entienden sus dirigentes que hay una contradicción entre el decreto y el reglamento del Congreso. No obstante, fuentes socialistas apuntan a que, en caso de que reglamentariamente se pudiera repetir la votación, los plazos que establece el decreto están agotados.
La portavoz parlamentaria socialista, Adriana Lastra ha pedido que se entienda la derrota de la votación como un “error humano”, aunque se trata de dos –quienes han introducido la papeleta de Tomás Fernando Flores cuando había que votar cuatro consejeros– y dos ausencias de las que solo la de Jordi Xuclà había sido comunicada al grupo que dirige. Pese a todo Lastra reclama que no se atienda a “conspiraciones”.
“Las casualidades no suelen existir. No deja de ser sospechoso. Hay un fallo caído del cielo”, había expresado minutos antes la portavoz del grupo confederal, Noelia Vera, que ha instado a los periodistas a preguntar “al resto de grupos”. Unidos Podemos había repartido únicamente las papeletas de los cuatro consejeros que se votaban antes que el presidente, por lo que sostienen que sus parlamentarios no han podido errar. PNV asegura que sus cinco parlamentarios han votado correctamente.
Estupor en el PSOE
“Estamos estupefactos”, reconocían varios diputados socialistas al salir del hemiciclo. “Me río por no llorar”, comentaba otro de los parlamentarios del PSOE que comentaban el fracaso en varios corrillos en el patio. “Es una cagada inmensa”, admitía otra de las fuentes consultadas.
“Al administrador único deberíamos haber ido desde el principio”, reconocían varios de los socialistas que han criticado el complejo proceso diseñado por el Gobierno a través de un decreto para forzar la renovación de RTVE.
El procedimiento contemplaba la celebración de hasta ocho plenos, de los que por ahora se han celebrado seis: dos en el Congreso para la elección de media docena de consejeros que le correspondían; dos en el Senado para elegir sus cuatro consejeros; otros dos ante el bloqueo de la Cámara Baja y ahora tendrá que votarse de nuevo una vez que el Gobierno designe al administrador único, que tendrá que salir adelante con dos tercios de respaldo en una primera votación o mayoría absoluta en la segunda.