Iglesias negociará con Errejón su futuro en el partido y el Congreso hasta el último minuto
Podemos quiere cerrar por la vía rápida la grieta con la que llegó a su II Asamblea Ciudadana antes de que la brecha sea tan grande que no se pueda reconstruir la unidad que pedían a gritos los asistentes a Vistalegre 2. Pablo Iglesias ha convocado para este sábado la primera reunión del nuevo Consejo Ciudadano Estatal (CCE). El órgano debe tomar dos decisiones fundamentales: la composición del Consejo de Coordinación (la ejecutiva) y quiénes ejercerán las portavocías estatales. En ambos casos un nombre se lleva toda la atención: Íñigo Errejón. Su futuro como secretario político está en el aire. También la portavocía de Unidos Podemos en el Congreso. Y difícilmente podrá mantener ambas.
“Estamos hablando mucho. Escuchándonos. Y haciendo las cosas de forma que sirvan para reconstruir y avanzar”, aseguran desde la dirección de Podemos a eldiario.es. Pablo Iglesias ha querido escuchar primero a Íñigo Errejón. Conocer sus intenciones. Si está dispuesto a asumir su línea política. Y a defenderla como uno de los principales portavoces del partido y en el día a día del trabajo parlamentario.
Esas conversaciones comenzaron el mismo domingo y las llevan directamente Iglesias y Errejón, como ambos han confirmado este martes. Y seguirán a lo largo de la semana.
No se trata solo de negociar qué pasa con Errejón. También cómo se reorganiza el partido hacia abajo, tanto en la vertiente política como en la laboral. Errejón ha defendido este martes que la corriente que lidera representa “el 40%” del partido. Y quiere que ese ratio se traslade a todos los ámbitos. Es cierto que la lista que encabezaba logró el 37% de los asientos en disputa en el CCE, pero el órgano lo componen también cuatro representantes de los círculos, otro del exterior y los 17 secretarios generales. Los números de los primarias, además, abundan en interpretaciones para todos los gustos. La decisión será política y fruto de un acuerdo.
En cualquier caso, nada está decidido. Y el propio Pablo Iglesias ha apostado de manera explícita por “feminizar” las portavocías. En eldiario.es, el por entonces candidato a revalidar la Secretaría General aseguró: “La feminización de las portavocías en Podemos no puede ser algo que se escriba en los papeles, es algo que tiene que verse”. Preguntado expresamente por la del Congreso, Iglesias dejó la respuesta abierta: “Es una decisión que tendrá que tomar el Consejo Ciudadano”.
El domingo, en el Palacio de Vistalegre de Madrid, no solo había dirigentes y militantes de Podemos comiéndose las uñas a la espera de los resultados de las primarias. En las primeras filas había representantes de partidos y organizaciones que forman parte del espacio político que se ha articulado alrededor de Podemos y de las confluencias. En Comú, IU, ICV, Equo, EUiA, En Marea y un largo etcétera de invitados que asistieron al cierre de la II Asamblea Ciudadana. Y que son los primeros interesados en que Podemos sea capaz de coserse hacia dentro para volver a construir hacia afuera.
Fin de la Secretaría Política
Tanto en Galicia como en Catalunya se están formando dos nuevos “sujetos políticos”, dos partidos, que llevarán más allá lo que hasta ahora ha sido una simple unión electoral. Y la paz en Podemos es fundamental para su éxito.
Nadie se atreve a dar por sentado nada. Ni dentro ni fuera de Podemos. Pero sí parece que algunas cosas han llegado a un punto sin retorno. Una de ellas es la mera existencia de la Secretaría Política. El mismo domingo la puso en duda Juan Carlos Monedero que, aunque no forma parte del staff del partido, tiene ascendencia y buena información. Este martes, Vicenç Navarro, consejero estatal recién elegido, hacía lo propio en un artículo en Público.es: “No va a haber ninguna purga de Errejón, tal como maliciosamente se está interpretando el hecho de que Errejón deje de ser, probablemente, secretario político, pues tal cargo no existe en ningún otro partido”.
El propio Pablo Iglesias ha contado en las últimas horas que la idea de la Secretaría Política fue suya y que correspondía a un momento muy concreto de la historia de Podemos en el que la sintonía en el grupo dirigente era absoluta. Algo que hoy no ocurre. El secretario general ha sometido a los inscritos su estrategia política y ha ganado, por lo que será él directamente el que marcará la línea a partir de ahora.
Esto no significa que Errejón se caiga de la ejecutiva. De forma insistente Iglesias ha dicho que quería para él una papel igual de relevante que el que tiene. La ausencia de Carolina Bescansa en el futuro CCE, y por tanto en el Consejo de Coordinación, deja libres las competencias en programa o análisis.
Lo que sí queda fuera de toda duda es la ascensión de Pablo Echenique, que repetirá salvo sorpresa de última hora como secretario de Organización. La desaparición de la Secretaría Política le aupará de facto al segundo puesto orgánico en la línea del partido. Echenique fue el segundo candidato más votado en las primarias, solo superado por Pablo Iglesias y un poco por encima de Errejón.
En la última entrevista que ofreció Iglesias a eldiario.es antes de Vistalegre, el secretario general aseguró que se tenía que terminar la idea del “tándem”. En opinión de los ganadores de la asamblea, no puede haber un único número dos. Iglesias prefiere un “coro”, una “orquesta” de la que él sea el director.