Ignacio González se quedó sin proyecto estrella cuando Sheldon Adelson decidió llevarse Eurovegas a Asia en vez de construir el 'megacasino' en Alcorcón. Superado ese obstáculo, que había supuesto incluso la modificación de las leyes relacionadas con el juego, el presidente de la Comunidad de Madrid dedica la precampaña electoral, en la que no sabe aún si será candidato, a apostar por nuevas operaciones urbanísticas. El sustituto de Esperanza Aguirre en la Puerta del Sol ha acelelerado millonarios proyectos relacionados con el ladrillo en la recta final de su mandato.
El presidente madrileño aprovechó el debate sobre el estado de la región para relanzar la Ciudad de la Justicia, un proyecto en el que el Gobierno regional ha enterrado más de 120 millones de euros, una idea de Aguirre de 2004 que fue paralizada en plena crisis por no ser “prioritaria”. Pocos meses antes de las elecciones autonómicas, González intentó hacer una demostración de fuerza al anunciar que ese complejo, que englobará todas las sedes judiciales de la Comunidad y que estará gestionado por una empresa, saldría adelante.
Diez años después de que Aguirre lo ideara y apenas tres meses antes de los comicios, el Gobierno regional ha sacado los pliegos de licitación de un contrato con un valor estimado de 771 millones de euros. La adjudicataria recibirá un canon anual de unos 45 millones durante los próximos 30 años por lo que el importe neto superará los 1.400 millones de euros.
Además, González ha aparecido recientemente en la foto junto a Ana Botella y la ministra de Fomento, Ana Pastor, después de que las tres administraciones gobernadas por el PP se pusieran de acuerdo para poner en marcha la Operación Chamartín. El proyecto, ideado en 1993 y postergado hasta hoy –incluso paralizado por la Justicia porque incumplía la ley del suelo–, echará a andar antes de las elecciones.
El trámite administrativo corresponde al Ayuntamiento de la capital, que ya ha dicho que intentará que esté listo antes del 24 de mayo, pero debe contar con el beneplácito del Gobierno regional. González ha dejado claro que no pondrá ningún impedimento. De hecho, destinará la parte del terreno que le corresponde para la edificación de viviendas de protección oficial, cuya construcción también queda en manos privadas.
Recuperación basada en el ladrillo
La Operación Chamartín consistirá en la rehabilitación urbanística de 3,1 millones de metros cuadrados para alargar el Paseo de la Castellana y construir parques empresariales, zonas verdes y unas 17.000 viviendas en la zona norte. Solo el 10% de esas casas serán de protección oficial.
El acuerdo de las administraciones de Botella, González y Pastor se alcanzó el 31 de enero y los tres dirigentes del PP lo celebraron y se promocionaron por la oportunidad que constituirá para crear empleo. También aseguraron que los gastos serán para BBVA y la promotora San José, que se encargarán de llevar a cabo el plan. El presidente regional aseguró que la obra puede salir adelante gracias a que “las circunstancias económicas han empezado a mejorar”. “Va a ser un ejemplo de lo que va a ser España en esta nueva andadura de recuperación económica”, dijo sobre el proyecto millonario.
También con la cercanía de las elecciones, las administraciones madrileñas anunciaron un plan para la zona de Campamento: la construcción de casas y zonas comerciales en un terreno que el Ministerio de Defensa sacará a subasta. Los vecinos aseguran que ese proyecto choca con el plan urbanístico, que prevé la construcción de unas 10.000 viviendas (7.000 de ellas de protección oficial).
El fracaso de la Operación Bernabéu
Aunque el proyecto incumbe al consistorio y a Defensa, debe contar con el visto bueno definitivo de la comunidad. González fue fundamental en los contactos con el constructor chino Wang Jianlin (Grupo Wanda) que es el principal interesado en la operación. “Es una oportunidad que no podemos dejar pasar”, dijo González tras reunirse con el magnate chino que compró el emblemático Edificio España al Banco Santander por 265 millones de euros.
González apoya estas tres operaciones urbanísticas tras haber recibido un varapalo en otro proyecto estrella de la legislatura que ha compartido con Botella: la Operación Bernabéu. El Tribunal Superior de Justicia de Madrid ha tumbado el acuerdo suscrito entre el consistorio y el Real Madrid que prevía la construcción de un centro comercial, un hotel y un aparcamiento, a cambio de que el club blanco hiciera un parque público en el actual centro comercial La Esquina (de menor tamaño que el planeado) y que cediera cuatro parcelas en Carabanchel –una zona que cotiza más a la baja que el Paseo de la Castellana–.
Los jueces consideran que la remodelación del estadio incumple el plan urbanístico y reporcha que las parcelas tengan siete kilómetros de distancia entre sí. La sentencia señala “una vinculación ficticia” de las parcelas con los objetivos planteados en el plan y niega que responda al “beneficio de un interés general”.
“tan pronto como las circunstancias económicas han empezado a mejorar” y “va a ser un ejemplo de lo que va a ser España en esta nueva andadura de recuperación económica”.