“No hace falta que me presente, todo el mundo me conoce”. Así empezó la intervención con la que Jordi Pujol pretendía participar en el coloquio posterior a una charla sobre nacionalismo que se celebró ayer en Barcelona. El expresident de la Generalitat tomo el micrófono y se puso en pie. En ese momento varios de los asistentes interrumpieron su discurso y decidieron abandonar la sala.
La primera persona que decidió abandonar el coloquio le espetó a Pujol: “No hemos venido a escuchar un mitin de convergencia. Este señor está desautorizado”. El veterano político respondió: “Si interesa, continuo pero si no...”. Pujol decidió continuar y a la primera baja entre el público se sumaron otra media docena, según la organización del evento.
Tras acabar el acto, Pujol se acercó a la mesa y reconoció ante los ponentes: “He cometido un error, no debería haberme puesto en pie”.
La organización de los cursos de la escuela Europea d´Humanitats confirma que Pujol es un habitual asistente a las charlas que se organizan con el patrocinio de La Caixa pero que este lunes fue la primera vez que decidió tomar la palabra.