Contar los votos de las elecciones al Parlamento Europeo saldrá en 2014 más caro que en los comicios celebrados hace cinco años. En concreto, el Ministerio de Interior gastará seis millones más en este servicio, que costó en 2009 doce millones de euros.
El BOE recoge el anuncio de licitación para la “realización del escrutinio provisional de los resultados electorales y su difusión” con un presupuesto de 18 millones de euros. Fuentes del departamento que dirige Jorge Fernández Díaz atribuyen este incremento del 50% a la subida del IVA, que Montoro cambió del 18% al 21% (aunque el importe base ya aumenta en casi cinco millones), al incremento del IPC –que cifran en el 10% desde entonces– y a la introducción de “mejoras técnicas en las comunicaciones de los resultados” gracias a la utilización de nuevas tecnologías más desarrolladas que en los comicios anteriores.
La empresa Indra fue la adjudicataria en 2009 del contrato para realizar las funciones de escrutinio y difusión de resultados de los comicios europeos en España que se celebraron el 7 de junio. Entonces la compañía ya presumió de avances tecnológicos como la implantación del servicio CAE (Colegio Administrado Electrónicamente) en tres provincias que permite, por ejemplo, imprimir las papeletas en las propias mesas electorales. En un comunicado, Indra informó de que se emplearían, por primera vez en las elecciones al Parlamento Europeo, “PDAs para la transmisión de datos desde los colegios electorales a los centros de recepción”.
Las elecciones europeas supondrán al erario más de 100 millones de euros. Los presupuestos generales del Estado para 2014 recogen la partida para “procesos electorales y consultas populares” por un importe de 75,02 millones para la organización de las los comicios del 25 de mayo. A esta cifra hay que sumar los 29,3 millones que Interior destina a las subvenciones electorales de los partidos políticos.
La abstención en los últimos comicios europeos superó a la participación: un 54% del electorado no acudió a los colegios el 7-J, lo que representa una caída de 25 puntos frente a las elecciones generales que se celebraron en noviembre de 2011, en las que la abstención fue del 29%.
Interior destinará, además, cerca de 11,5 millones de euros para materiales electorales (urnas, cabinas y soportes señalizadores, sobres, manuales de miembros de mesas e impresos) para los comicios o consultas que se celebren en los próximos cuatro años.