La portada de mañana
Acceder
Sánchez rearma la mayoría de Gobierno el día que Feijóo pide una moción de censura
Miguel esprinta para reabrir su inmobiliaria en Catarroja, Nacho cierra su panadería
Opinión - Cada día un Vietnam. Por Esther Palomera

El rector de la URJC se desvincula del montaje para Cifuentes y declara que pensó que las actas eran verdaderas

El rector de la Universidad Rey Juan Carlos, Javier Ramos, ha declarado esta tarde como testigo ante la jueza que investiga el máster de Cristina Cifuentes. Ha dicho desconocer muchos detalles del caso, pero ha incidido en que siempre pensó que los documentos que exhibió la expresidenta para tratar de demostrar que había completado el máster, y que le proporcionó la propia Universidad, eran verdaderos.

La magistrada Carmen Rodríguez-Medel le ha citado en el Juzgado de Instrucción número 51 justo después de la secretaria general de la universidad, Pilar Charro Baena, y el vicerrector de Planificación, Andrés Martínez Fernández. Ramos ha declarado durante casi tres horas en las que le han preguntado todos los abogados personados en la causa.

Según fuentes jurídicas, durante su declaración, Ramos ha dicho desconocer muchos detalles del caso y ha respondido a otras tantas preguntas con un “no me acuerdo”. En otras, cambiaba su versión cuando los abogados le iban recordando detalles de lo ocurrido, como las profesoras que figuraban como firmantes de las actas de convalidación de alumnos.

La situación ha llegado a sorprender a la propia jueza del caso, que en un momento dado le ha mostrado su sorpresa porque, siendo el rector de la Universidad, afectado directamente por este caso, diga que no recuerde muchas de las cosas que le preguntaban. Su respuesta ha sido que tiene muy mala memoria.

Durante su declaración le han preguntado por el acta del Trabajo de Fin de Máster que la Universidad proporcionó a Cifuentes el mismo día que se destapó el escándalo, y que la expresidenta usó para tratar de contrarrestar las informaciones. Dos profesoras declararon más tarde que sus firmas habían sido falsificadas en ese documentos.

Ramos se ha desvinculado de ese montaje, que reconoció el responsable del máster, Enrique Álvarez Conde. Según le ha dicho a la jueza, el siempre pensó que ese documento era verdadero.

Al rector también le han preguntado sobre las llamadas que, en un escrito enviado al juzgado, dijo haber recibido del Consejero de Educación de la Comunidad de Madrid, Rafael Van Grieken, para que proporcionase los documentos necesarios para responder a la información de eldiario.es. Según fuentes presentes en el interrogatorio, no ha sabido explicar con claridad este extremo.

De hecho, a la salida del interrogatorio Ramos ha negado que el haya hablado de “presiones” por parte de Van Gireken, y no ha querido contestar a los medios sobre las llamadas que recibió. Ha hecho una breve declaración ante las cámaras y se ha marchado sin contestar a las preguntas de los periodistas.

En su breve declaración, Ramos ha dicho que los hechos son “muy anteriores” a su toma de posesión como rector y que “la gran perjudicada es la Universidad”, por lo que están colaborando con la investigación.

La querella que ha dado origen al caso Cifuentes señala al propio Ramos y al director del Instituto de Derecho Público, Enrique Álvarez Conde. Ante la jueza, la profesora Cecilia Rosado, presunta autora material de la falsificación de las firmas del acta del tribunal del Trabajo de Fin de Máster, señaló a Maite Feito. Según su declaración, la asesora del consejero de Educación y amiga personal de Cifuentes le dijo: “Arreglad esto o el rector y la presidenta os matan”.

La propia Cifuentes dirigió una carta a Javier Ramos en la que le responsabiliza de la falsificación del acta de su TFM. Como recordaba la entonces presidenta en la carta, el acta del TFM con las firmas falsificadas salió de una dirección electrónica del Rectorado que dirige Javier Ramos.