El Consejo de Ministros ha aprobado en su reunión extraordinaria de esta mañana un proyecto de ley orgánica para regular la abdicación del rey Juan Carlos I que cuenta con un artículo único y una disposición final única para hacer efectiva la renuncia a la Corona de España. La norma entrará en vigor en el mismo momento en que se publique en el BOE.
El proyecto aprobado incluye un artículo único que dice textualmente: “S. M. el Rey Juan Carlos I de Borbón abdica la Corona de España. La abdicación será efectiva en el momento de entrada en vigor de la presente ley orgánica”. La disposición final única indica que la entrada en vigor tendrá lugar en el momento de su publicación en el “Boletín Oficial del Estado.
Además, el Gobierno ha aprobado en su reunión una declaración institucional de apoyo a la monarquía, de agradecimiento a la labor de Don Juan Carlos y en la que se subraya que la Constitución “asegura la normalidad en la sucesión a la Jefatura del Estado”.
Los grupos parlamentarios podrán presentar enmiendas al breve articulado de la ley orgánica sobre la Sucesión de la Corona que el Consejo de Ministro ha aprobado este martes en una reunión extraordinaria celebrada en la Moncloa. En el caso de que estas enmiendas se materialicen, serán debatidas en el mismo pleno en el que se discuta la ley, y no pasarán previamente por Comisión - como suele ser habitual- al haber decidido que el texto se tramite por procedimiento de urgencia y en lectura única. Ninguna de ellas prosperará dado que el PP goza de mayoría absoluta.
El Gobierno y el PP esperan contar con el respaldo mayoritario del PSOE y los votos a favor de UPyD, de la diputada de Coalición Canaria, Ana Oramas, del representante de UPN, Carlos Salvador y del de Foro Asturias, Enrique Álvarez Sostre. La Izquierda Plural y parte del Grupo Mixto votarán en contra.
Mientras la postura de CiU sigue sin concretarse, el portavoz del PNV, Aitor Esteban, ha adelantado que sus cinco diputados se abstendrán. Según ha explicado en rueda de prensa, no van a votar en contra porque “sería tanto como rechazar la abdicación de Juan Carlos I y pedirle que continuara como jefe del Estado”, algo que no pretenden. Esteban cree que la monarquía está “superada” y ha señalado que el PNV se considera un partido “republicano” .
En opinión del portavoz del PNV, debería abrirse una nueva etapa, también en Euskadi, y convocarse un referéndum para que los ciudadanos decidan si quieren república o monarquía.“Si el próximo Rey va a empezar su discurso de nuevo hablándonos una y otra vez de la gran nación española, vamos mal”, ha dicho, emplazando a Don Felipe a que, cuando sea proclamado rey, “se moje”.
“No puede ser sólo una figura. Tiene que mantener una moderación en el lenguaje público, pero se le tiene que ver moviéndose y demostrando si tiene capacidad, coraje y vis política. Si no, creemos que la monarquía no va a ser útil y no tiene sentido superponerla a una república que, desde luego, es un sistema mucho más propio del siglo XXI”, ha concluído el portavoz peneuvista.
Consulta íntegra el anteproyecto de ley de sucesión.
El Consejo de Ministros ha aprobado una Declaración Institucional con motivo de la abdicación de S. M. el Rey Don Juan Carlos I de Borbón. Su texto es el siguiente:
“Ayer, Su Majestad el Rey Don Juan Carlos I comunicó a los españoles, y oficialmente al Gobierno, su voluntad de abdicar; abdicación que será efectiva cuando las Cortes Generales aprueben y se publique la Ley Orgánica que la Constitución prevé a tal fin y que el Consejo de Ministros, reunido con carácter extraordinario en el día de hoy, remitirá al Congreso de los Diputados.
Desde su proclamación como Rey, Don Juan Carlos quiso serlo, y lo ha sido, de todos los españoles.
Sin su impulso y liderazgo la Transición, sencillamente, no habría sido posible. Su esfuerzo, junto con el de todos los que contribuyeron al advenimiento de la democracia, culminó en la Constitución, aprobada por referéndum el 6 de diciembre de 1978 y sancionada por el Rey en la sesión solemne de las Cortes Generales del 27 del mismo mes y año.
Si España es hoy un Estado de Derecho, moderno y democrático, que ha logrado alcanzar altas cotas de bienestar social y protagonismo en Europa y en todo el escenario internacional, se debe, en gran medida, al reinado de Don Juan Carlos I.
La Constitución designó al Rey como el símbolo de la unidad y permanencia de España, árbitro y moderador de los poderes del Estado y el máximo representante de la nación española.
Durante estos 39 años, el Rey ha desempeñado sus altas funciones constitucionales de forma decidida y entregada, tanto dentro de nuestras fronteras, como en el ámbito internacional, contribuyendo de forma decisiva a que España sea un actor importante y respetado en el concierto de las naciones
Y esta labor no ha sido siempre fácil. En los momentos en que el nuevo marco de convivencia se vio en peligro, la intervención del Rey al servicio de los españoles y de su democracia fue decisiva, asegurando los cimientos de libertad y concordia sobre los que se erigió el nuevo Estado social y democrático de Derecho.
El Gobierno quiere expresar públicamente su lealtad, afecto y gratitud a SS. MM. los Reyes, Don Juan Carlos y Doña Sofía, por su entrega y dedicación a España y a los españoles durante su reinado.
La Constitución asegura la normalidad en la sucesión a la Jefatura del Estado.
Una vez que la abdicación sea efectiva, dará comienzo el reinado del hoy Príncipe de Asturias, Don Felipe de Borbón y Grecia. El Gobierno quiere expresar su seguridad de que su formación, carácter, experiencia y vocación de servicio a España le permitirán desempeñar adecuadamente sus funciones al servicio de nuestra Patria, y fortalecer la Monarquía parlamentaria, que la Constitución proclama como garantía de la unidad, progreso, concordia y bienestar de todos los españoles.“