Noticia servida automáticamente por la Agencia EFE
Esta información es un teletipo de la Agencia EFE y se publica en nuestra web de manera automática como parte del servicio que nos ofrece esta agencia de noticias. No ha sido editado ni titulado por un periodista de eldiario.es.
Libertad condicional al expresidente sudafricano Zuma por motivos de salud
Johannesburgo, 5 sep (EFE).- El expresidente sudafricano Jacob Zuma, en prisión desde julio por desacato tras negarse a declarar por corrupción y ser condenado a 15 meses de cárcel, fue puesto en libertad condicional por motivos de salud, informó este domingo el Departamento de Servicios Penitenciarios de Sudáfrica.
“Además de tener una enfermedad terminal y una discapacidad física, los reclusos que padecen una enfermedad que limita gravemente su actividad diaria o su cuidado personal también pueden ser considerados para la libertad condicional médica”, explicó el departamento en un comunicado.
“La colocación en libertad condicional médica para el señor Zuma significa que completará el resto de la sentencia en el sistema de correcciones comunitarias, por lo que debe cumplir con un conjunto específico de condiciones y estará sujeto a supervisión hasta que venza su sentencia”, añadió la nota oficial.
Zuma, de 79 años, se sometió el pasado 14 de agosto a una cirugía y tenía programadas otras operaciones para días sucesivos, señalaron entonces las autoridades penitenciarias.
“Como resultado, el Departamento de Servicios Penitenciarios no puede prever una fecha de alta, ya que nuestra prioridad ahora es que el señor Zuma reciba la mejor atención posible”, dijo el portavoz del organismo, Singabakho Nxumalo, en aquel momento.
Tras una observación rutinaria, el expresidente ingresó el 6 de agosto en un hospital externo a la prisión de Estcourt (este), donde cumplía sentencia.
Ese contratiempo provocó, una vez más, el aplazamiento del juicio en el que está procesado por corrupción y otros cargos en relación con un acuerdo armamentístico firmado a finales de los años noventa.
UNA “LESIÓN TRAUMÁTICA”
En una carta enviada a la prisión y a la Fiscalía, el equipo médico del expresidente aseguró que el exmandatario sufrió una “lesión traumática” el año pasado y necesita “un tratamiento de emergencia exhaustivo” de al menos seis meses.
La carta no aclaraba, sin embargo, el padecimiento, algo que la Fiscalía subrayó en la vista virtual celebrada el pasado 10 de agosto por el Tribunal Superior de Pietermaritzburg (este), donde se aplazó el juicio para los próximos 9 y 10 de septiembre, fechas que podrían incurrir en un nuevo retraso.
En esta causa a Zuma, que gobernó de 2009 a 2018, se le imputan cargos de asociación ilícita, corrupción, lavado de dinero y fraude tras cerca de 800 operaciones supuestamente fraudulentas relacionadas con un acuerdo de armas millonario firmado a finales de la década de 1990 con la empresa francesa Thales.
La imputación siguió un camino judicial muy complejo durante más de una década hasta que en 2018 fue acusado formalmente, pero la causa permanece trabada por los recursos de la defensa.
Zuma había dimitido de la Presidencia sólo un mes antes del inicio de este juicio, forzado por su propio partido en medio de múltiples escándalos de corrupción.
Entre ellos destaca el de la “Captura del Estado”, investigación en la que se le acusa de orquestar un entramado corrupto en todo el aparato público durante su gobierno con el objetivo de beneficiar a su persona, a otros altos cargos y a empresarios afines.
Zuma alega que todas las acusaciones contra él son una persecución política.
Por ello, entre 2020 y 2021, se negó repetidamente a testificar ante la comisión oficial de investigación que estudia las acusaciones de la “Captura del Estado”, a pesar de que las citaciones eran de obligado cumplimiento.
Así, el pasado 29 de junio pasado el Tribunal Constitucional sudafricano le condenó a 15 meses de cárcel por desacato.
Dos días después del encarcelamiento, se desataron en Sudáfrica varias días de disturbios y saqueos masivos que, si bien empezaron como protestas de apoyo a Zuma, degeneraron en violencia general, espoleada por los graves problemas socioeconómicos del país.
El Gobierno sudafricano sostiene que la ola de disturbios, que dejó 337 muertos y daños económicos por valor de 50.000 millones de rands (unos 2.862 millones de euros), fue “instigada” y planeada.
0