René González, uno de los cinco cubanos condenados en Estados Unidos por espionaje y actualmente en libertad supervisada después de 13 años de cárcel, podrá quedarse de forma definitiva en Cuba, después de renunciar a su ciudadanía estadounidense.
“El acusado podrá cumplir el resto de su período de libertad supervisada en Cuba y no tendrá que volver a Estados Unidos”, establece la orden de siete páginas emitida hoy en Miami por la jueza estadounidense Joan A. Lenard.