Los servicios del Congreso han cortado esta mañana la señal wi-fi y han utilizado inhibidores de frecuencia para limitar el funcionamiento de las líneas 3G. Todo con un objetivo: evitar que las palabras del presidente del BCE, Mario Draghi, a sus señorías trasciendan más allá de la reunión que se celebra a puerta cerrada y sin taquígrafos.
La decisión del Congreso de bloquear el acceso a la red durante la comparecencia de Draghi ha cogido por sorpresa a los diputados de la Izquierda Plural que habían anunciado su intención de retransmitir en directo las palabras del presidente del BCE a a través de una web creada para la ocasión.
El bloqueo digital impuesto en la Cámara Baja ha causado un caos entre los periodistas acreditados, que han tenido que seguir haciendo su trabajo sin conexión a internet, con dificultades para utilizar sus teléfonos móviles y sin señal de ningún tipo para poder comunicarse con el exterior. Tan solo la red wi-fi de la agencia Efe ha seguido funcionando mientras Draghi estaba en el Congreso de los Diputados.
Esta crónica ha sido dictada desde un teléfono público, dado que la señal va y viene y no permite realizar el trabajo correctamente.