Cuando Manuela Carmena decidió lanzar su proyecto político, Más Madrid, en noviembre de 2018 para optar a la reelección como alcaldesa, su idea era la de un partido que tuviera únicamente vocación madrileña. Menos de un año después, la formación irrumpía en el escenario electoral nacional bajo la siglas Más País, una vez se confirmaba el fracaso de las negociaciones para formar Gobierno entre PSOE y Unidas Podemos y la repetición de los comicios para el 10 de noviembre. Entonces, la cara visible ya era otra. Íñigo Errejón heredaba el proyecto tras la salida de Carmena de la política y abandonaba esa idea de fuerza exclusivamente madrileña.
Ahora, un año después del 'pacto de las empanadas' (como se bautizó al acuerdo que llegaron Carmena y Errejón para hacer ticket electoral en mayo y que supuso la salida del segundo de Podemos), Más Madrid repiensa su futuro. Errejón logró sumar apenas dos escaños por Madrid y uno por Valencia (sumado a la marca Compromís). Quedaba patente que la marca si en algún lugar está consolidada es en la capital, la ciudad donde nació. De ahí que algunas voces del partido defiendan que el futuro pasa por seguir consolidándose en la provincia.
El pacto de Gobierno express entre PSOE y Unidas Podemos ha desdibujado más si cabe el papel de Más País y su espacio de oposición. Ni siquiera en Madrid donde son primera fuerza en el Ayuntamiento frente a un gobierno de coalición de PP y Ciudadanos, apoyado por la extrema derecha, están consiguiendo ser una oposición fuerte. A finales de diciembre, el alcalde José Luis Martínez Almeida lograba sacar adelante los presupuestos sin el apoyo expreso de Vox, después de un error de cálculo de Más Madrid que se quedó sin un voto tras la renuncia como concejala de Inés Sabanés que regresaba al Congreso veinte años después. Sabanés que iba tercera en la lista se imponía a Marta Higueras, número dos, por una mezcla de deseo de esta última de seguir liderando el partido en Madrid ciudad y una presión por lo que quiere representar Más País como partido verde ya que Sabanés proviene de Equo.
En los últimos meses desde las elecciones generales, casi el único momento de gloria en la oposición ha sido la gestión el caso de la líder de Vox Rocío Monasterio y sus irregularidades como arquitecta, un tema en el que Más Madrid ha llevado la voz cantante desde el Ayuntamiento (Monasterio es diputada autonómica) presentando una denuncia ante Fiscalía. Todo ello, sumado a una profunda crisis que atraviesa la formación, por las dos corrientes que la componen: los próximos a Carmena (que ella eligió para acompañarla en la lista municipal) y los cercanos a Errejón.
Con estos mimbres, Manuela Carmena regresaba este martes a la escena pública (de la que nunca se ha llegado a ir), para presentar el que será su nuevo espacio de “acción y reflexión política”. Carmena no va sola en esto, esta vuelta la ha urdido junto a Marta Higueras, amiga de años de la exalcaldesa, la que fuera su 'número dos' en el Gobierno de Ahora Madrid y a la que la regidora siempre ha visto (y promocionado) como su sucesora. Los concejales próximos a la exregidora han recibido muy positivamente el proyecto, muchos de ellos elegidos expresamente por ella para la candidatura de mayo, que diseñó (casi) a su medida.
El anuncio de la exprimera edil pilló por sorpresa al otro sector de Más Madrid, el que representa Íñigo Errejón, reconocen algunas fuentes del partido. “Había errejoners importantes que no lo sabían”, aseguran a este diario. “Lo que está detrás de esto es el enfrentamiento entre la línea manuelista y la errejonista”, defiende un dirigente próximo a la exalcaldesa. “Más Madrid está desnortado, sin proyecto y sin liderazgo y había que hacer algo”, añade otra fuente. Desde el entorno de Errejón lo niegan y aseguran que ha existido coordinación en todo momento.
El líder de Más País estará este lunes en el acto de presentación del espacio “en primera fila”, añaden. Pero lo cierto es que la desvinculación de Manuela Carmena del proyecto político de Más País ha sido cada vez más notoria. Pese a que se unió al cierre de la campaña y echó una mano durante la misma cuando las encuestas comenzaron a pronosticar el batacazo electoral, durante la presentación de su libro a principios de diciembre, la exprimera edil aseguró no tiene “ninguna relación” con el partido ni tampoco “especialmente” con su líder, Íñigo Errejón. “No estoy afiliada a nada”, zanjaba en la presentación de 'A los que vienen' (editorial Aguilar), pese a que desde el entorno de Errejón siempre han asegurado que Carmena tendría un puesto honorífico cuando el partido se constituyera tras una congreso que ha ido retrasándose sine die y que ahora se espera para primavera.
Ahora, el escenario en Más Madrid (donde el partido es fuerte) versa entre dos corrientes: los que apuestan por intentar relanzar la marca de Más País con aspiración nacional, que se inspire en los partidos verdes europeos y los que creen que el camino es volver a pensar en una candidatura amplia de vocación madrileña de cara a las elecciones de 2023.
“De aquí a verano hay que construir una agenda de actos y mensajes. Recuperar la figura de Manuela como referente, y después de analizar cómo ha ido ver cuáles son los siguientes pasos”, apuntan algunos ediles que ven el regreso de Carmena como una oportunidad de volver a situarse en el tablero político. 'Cuidar la democracia' celebra su primer acto público este lunes 27 de enero con un debate sobre desigualdad y gestión entre Carmena y la filósofa Adela Cortina.
En una carta para presentar el proyecto, Carmena apuesta por que, una vez alcanzado el pacto de gobierno en el Estado (entre PSOE y Unidas Podemos), “el principal reto que actualmente tiene la izquierda, o las izquierdas, es devolver Madrid al camino del progreso y la estabilidad, devolver a Madrid la posibilidad de un futuro con esperanza”: “Para lograrlo, debemos ofrecer un horizonte de progreso creíble, y deseable”, apunta la exalcaldesa, pese a que ella misma ha negado que este espacio tenga vocación política.
Con estas palabras, reconocen algunas voces de Más Madrid, el espacio pretende ser un punto de encuentro para reconfigurar el espacio progresista en Madrid. Eso pasa por “hacerse fuerte, convertirnos de nuevo en un referente madrileño de progreso, con posibilidades de ganar de nuevo en Madrid”, defienden varios, con la idea de generar un espacio amplio con el resto de fuerzas de izquierdas. “Sin prisa queremos ir tendiendo puentes. Y se tienden trabajando, siendo un referente en la sociedad”.