Manuel Valls ha pasado de fichaje estrella a verso suelto en la órbita de Ciudadanos. El ex primer ministro francés, candidato a la alcaldía de Barcelona, criticó anoche la reunión 'secreta' que mantuvieron este domingo en un hotel de la capital el candidato a la Comunidad de Madrid, Ignacio Aguado, con su homóloga de Vox, Rocío Monasterio. “¿Normalidad democrática o normalización de la extrema derecha?”, se preguntó el político catalán. “No puedo esconder otra vez mi gran preocupación”, subrayó en su cuenta de Twitter.
A ese primer tuit siguió después otro en el que Valls continuó cargando contra cualquier contacto de Ciudadanos con “la extrema derecha”.
La respuesta más sonada que recibió fue la de Marcos de Quinto, diputado en el Congreso por Madrid y fichaje estrella de Albert Rivera. El ex vicepresidente mundial de Coca Cola criticó a Valls por ofrecer sus votos a Colau. “¿Se lo dices al PSOE para que se abstengan -tanto en la Comunidad de Madrid como en el Ayuntamiento- para permitir que haya un gobierno Cs-PP sin necesidad de otros apoyos?”, añadió.
En total, De Quinto dedicó hasta tres mensajes en la red social para cargar contra Valls, apuntando a supuestos pacto del PSOE con Bildu o lo que llamó “extrema izquierda”.
No es la primera vez que Valls lanza advertencias a Albert Rivera en contra de sus posibles alianzas con Vox. Después de las elecciones aseguró que si Ciudadanos negociaba o entraba en tripartitos con el partido de Abascal, él rompería con Ciudadanos.
Valls, además, ha ofrecido los votos de los seis concejales de su Plataforma en Barcelona a Ada Colau “a cambio de nada” para evitar que los independentistas de ERC se hagan con la Alcaldía, una decisión de la que se ha desmarcado Ciudadanos.
Las tensiones entre el exprimer ministro francés y el líder de Ciudadanos ya se dejaron entrever tras la manifestación de Colón en defensa de la unidad de España en la que participaron PP, Ciudadanos y Vox y en la que hubo foto de 'familia' de los tres líderes en el escenario. Valls se negó a subir y arremetió contra cualquier pacto o acuerdo con los de Abascal. Tampoco subió el eurodiputado Luis Garicano, igualmente crítico con Vox.