Pedro Sánchez ya tiene sustituta para Adriana Lastra. La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, será la nueva vicesecretaria general del PSOE, según ha avanzado El País y han confirmado a elDiario.es fuentes gubernamentales. Montero es uno de los pesos pesados del Gobierno y hasta ahora formaba parte de la Ejecutiva como vocal. Ahora será, además de titular de Hacienda, la número dos del PSOE. La intención del presidente es engrasar la maquinaria entre Ferraz y Moncloa. Por eso va a crear una estructura que será la que pilote el funcionamiento del partido y de la que formarán parte los ministros que se sientan en la Ejecutiva y el jefe de gabinete de Sánchez, Óscar López.
Montero, que compaginará el cargo de vicesecretaria general del partido con el actual como titular de la cartera de Hacienda, fue la portavoz de la coalición hasta los cambios del pasado verano, pero extraoficialmente lo ha seguido siendo en muchos momentos. Ahora se formaliza hasta cierto punto ese papel con el ascenso en el partido.
El líder socialista también asciende en el organigrama a la ministra de Educación, Pilar Alegría, que será la nueva portavoz del partido en sustitución de Felipe Sicilia, que había sido una apuesta de Lastra. Sánchez certifica ese fracaso y también el de Héctor Gómez como portavoz en el Congreso, donde le sustituirá Patxi López. Seguirá en su puesto en el Senado Eva Granados. A la Ejecutiva se incorpora Miquel Iceta como responsable de Memoria Democrática, que es el puesto que hasta ahora ocupaba López.
Un nuevo núcleo duro
Montero, Alegría, Iceta y los portavoces parlamentarios formarán parte del círculo de decisión del que también forman parte el ministro de Presidencia, Félix Bolaños, y el secretario de Organización, Santos Cerdán, que es el superviviente a la pugna interna que había desatado la ya exvicesecretaria general. Y el único 'sanchista' que pervive en el núcleo de poder. Esa será la principal estructura de mando del partido en plena sintonía con Moncloa para evitar las disonancias que se han producido en el último año, a pesar de que la profunda remodelación del Gobierno también había perseguido un mejor engranaje.
La remodelación de la Ejecutiva, que no tiene ni un año de vida tras el 40º Congreso del pasado mes de octubre, incluye la creación de un puesto de adjunto a la Secretaría de Organización que ostentará el jienense Juan Francisco Serrano, que ha sido uno de los hombres de confianza de Cerdán durante este tiempo. La secretaría de Pacto de Toledo que hasta ahora ocupaba será para Iván Fernández, el alcalde de Corvera, que sustituirá en la cuota asturiana a Lastra.
Sánchez ha optado por dar una mayor relevancia el partido a personas con larga trayectoria orgánica, como el exlehendakari, con quien selló la reconciliación definitiva la semana pasada fundiéndose en un abrazo al acabar una intervención en el debate sobre el estado de la nación. Ante los ataques del PP por los acuerdos con EH Bildu, Moncloa decidió dar un mayor protagonismo en los últimos días al que será ya portavoz del Congreso. En el caso de Alegría, lleva años de militancia y Sánchez la incorpora a su equipo más estrecho de colaboradores, a pesar de la distancia que les separó en el pasado. La dirigente aragonesa fue uno de los apoyos de Eduardo Madina en la batalla de 2014 y de Susana Díaz tres años después. De hecho, fue la portavoz de la candidatura de la andaluza frente a Sánchez.
Iceta ha sido siempre un cómplice de Sánchez y uno de sus dirigentes de confianza en Catalunya, aunque había pasado a un segundo plano también en la relación con el presidente en favor del exministro de Sanidad y hoy líder del PSC, Salvador Illa.
El Comité Federal ratificará todos estos cambios en una reunión que Sánchez convocó para este sábado después de la abrupta dimisión de Adriana Lastra. No obstante, lleva varias semanas pergeñando modificaciones que le permitan dar un impulso al partido y, en consecuencia, al Gobierno tras la debacle en Andalucía.