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Feijóo fracasa en la primera votación de su investidura frente a la mayoría absoluta del Congreso

La mayoría absoluta del Congreso ha rechazado este miércoles la investidura de Alberto Núñez Feijóo como presidente del Gobierno. El candidato del PP designado hace más de un mes por el jefe del Estado no ha sumado un solo voto a los que ya tenía antes de la decisión del rey. Tampoco ha logrado ningún acercamiento en el debate celebrado ayer y hoy. Feijóo ha obtenido 172 apoyos, los propios más los de Vox, Coalición Canaria y UPN. Y 178 en contra. El resultado anticipa, además, la derrota definitiva del líder de la derecha en la segunda votación, prevista para el viernes.

La primera votación de las dos que se prevén para las investiduras ha concluido con el resultado previsto. En las dos jornadas que ha durado el debate todos y cada uno de los portavoces han ratificado las posiciones que ya estaban definidas desde hace semanas. Antes incluso de que Felipe VI comenzara la ronda de consultas con los partidos, pero también inmediatamente después.

Durante la votación, el diputado del PSOE Herminio Sancho Íñiguez ha protagonizado un lapsus. A su votación para que el líder del PP sea presidente del Gobierno ha dicho en un inicio “sí” en lugar de “no”, lo que ha provocado un momento de confusión que se ha rectificado finalmente.

Al momento, Sancho se ha dado cuenta de su error después de que la bancada socialista dijera “no” entre risas y la diputada que había leído su nombre reaccionara con duda: “¿sí? ¿No? ¿Perdón?”. Ha rectificado y la mesa del Congreso ha aceptado su “no” a la investidura.

Feijóo necesitaba la mayoría absoluta para ser investido presidente a la primera. Pero sus 137 diputados, los 33 de Vox y los dos que le aportan CC y UPN quedan a cuatro de los 176. Una distancia corta, numéricamente, pero insalvable políticamente. Tanto, que la segunda votación, prevista para el próximo viernes, se saldará con toda probabilidad con el mismo resultado.

Aunque al líder del PP le bastaría en esa segunda votación con una mayoría simple (más síes que noes), Feijóo tampoco lo logrará y su investidura será definitivamente derrotada. El candidato lo tenía claro desde el principio. “Me debo a quienes clamaron 'igualdad' en Madrid”, dijo en su intervención inicial.

Se abrirá así el tiempo de Pedro Sánchez. De hecho, la constatación previa de que la investidura de Feijóo era, y es, imposible, empujó al candidato del PP a plantear su discurso inicial del martes, y sus réplicas, a construirse como líder de la oposición, a exponer más una moción de censura contra el presidente del Gobierno en funciones.

Pero la estrategia del PP se derrumbó cuando el PSOE optó por el diputado Óscar Puente para lanzar una dura réplica y, a la vez, defender a Sánchez de un 'cara a cara' para el que Feijóo estaba preparado. La idea era provocar un debate sobre la amnistía. Pero el 'plot twist' de los socialistas desubicó al candidato del PP, que trufó sus intervenciones con otros portavoces de continuas referencias a Puente y al silencio de Sánchez.

El guion de la investidura se ha mantenido este miércoles, con la intervención de EH Bildu y el PNV. Los dos grupos vascos han ratificado su rechazo a la investidura de un Feijóo visiblemente molesto con el PNV, a quien ha llegado a calificar como el “clínex” del PSOE, después de intentar cortejar sus cinco votos desde hace semanas. Feijóo ha dicho no entender cómo es posible que ambos partidos, que compiten por el voto y tienen elecciones previstas para el año que viene, comparten estrategia en Madrid

Su portavoz, Aitor Esteban, le había reiterado su 'no' previamente y ha despejado las posibles dudas de Feijóo, además de torpedear la idea del PP de que Feijóo no gobierna porque no quiere ceder ante los independentistas. “Hay una ballena en la piscina. Los 33 votos de Vox son imprescindibles. Además esos 33 votos seguirían siendo imprescindibles durante la legislatura. La ballena tiene un tamaño imposible de esconder”, ha dicho Esteban desde la tribuna. “Tiene que empezar descontando 33”, ha zanjado.

Aunque el debate con Esteban ha sido agrio, el enfrentamiento de Feijóo con la portavoz de EH Bildu, Mertxe Aizpurua, ha sido más duro. En él, el líder del PP ha vuelto a confirmar su alianza con Vox y a defender sus pactos con la extrema derecha. “Bildu es el único partido en España al que habría que hacer un cordón sanitario”, ha dicho. “Respeto al PNV, a Bildu no”, ha añadido.

El candidato ha cerrado su intervención en el debate en el Congreso con un breve discurso en el que ha reafirmado la alianza de su partido con la extrema derecha. Feijóo ha agradecido “a los integrantes de Vox” y al “señor Abascal” el “voto favorable anunciado” para hacerle presidente del Gobierno. Un apoyo, ha dicho Feijóo, que demuestra “que se puede llegar a acuerdos entre distintos sin renunciar a los programas electorales”. “Seguiremos siendo partidos distintos. Se demuestra que en España hay un proyecto alternativo, que se construye sobre lo que nos une en lugar de cimentar lo que nos separa”, ha zanjado.

También ha aprovechado para arremeter otra vez contra el presidente en funciones, Pedro Sánchez, por no defender ayer la posición del PSOE y delegar en el diputado Óscar Puente. “Ha preferido escapar para no decir la verdad”, ha dicho. “La verdad sobre sus negociaciones, las exigencias a las que está sometido, su posición en la amnistía, el independentismo y la financiación ideológica de todo ello”.

“Quien calla, otorga”, ha afirmado. “Veremos la intensidad de su silencio, lo que otorga y lo que exigen. No ha querido salir a la tribuna porque no podría defender ayer lo que defendió hace dos meses delante de todos los españoles”, ha añadido. Y ha concluido: “Mi propuesta sigue vigente, también para corregir los efectos negativos. Seguirá Vigente para los españoles, solo a ellos me debo”.

El viernes se celebrará la segunda votación, y se abrirá el tiempo de Pedro Sánchez. Pero Feijóo ya ha comenzado a hacer oposición al presidente en funciones.