La ministra de Justicia dice que no hubo “agresión” en el suicidio asistido de la mujer enferma de esclerosis múltiple

La ministra de Justicia, Dolores Delgado, ha sido clara en su análisis sobre el suicidio asistido de María José Carrasco, enferma de esclerosis múltiple, por su marido, que fue detenido y ahora está en manos de los jueces: “No estamos ante un agresión sino ante un acto solicitado por la propia persona que falleció”. 

“No es una agresión, lo dijo el propio Ángel –ha dicho Delgado sobre las explicaciones que ha dado el marido de Carrasco– se trataba de un acto de amor según manifestó. La norma admite interpretaciones, estas interpretaciones no son unívocas”. Delgado ha expresado que todas las posibilidades están “abiertas” antes de recordar que la última decisión la tendrán los jueces. 

Pedro Sánchez dejó entrever que concedería el indulto al marido de Carrasco si fuera condenado. Preguntada por esa cuestión, Delgado ha contestado que el Gobierno tiene una “sensibilidad” con ese asunto ya que pretende impulsar una ley que regule la eutanasia si sigue la próxima legislatura. “Se hizo una valoración de los hechos pero acorde al propósito del Gobierno para regular la eutanasia”, ha dicho la ministra. 

Cuando los periodistas han insistido en por qué el Gobierno se pronuncia sobre el posible indulto de Ángel, que aún no ha sido condenado,  y no sobre los líderes independentistas a los que está juzgando el Supremo, Delgado se ha matizado: “Ni en uno ni en otro caso el presidente ha dado su opinión sobre un indulto, ni en uno ni en otro caso; sí ha explicado la sensibilidad ante situaciones humanas límite como la hemos vivido”. 

A pesar de que los miembros del Ejecutivo suelen evitar pronunciarse sobre asuntos judicializados, en el caso del suicidio asistido de Carrasco, sí lo han hecho. Por ejemplo, el titular de Interior, Fernando Grande-Marlaska, cuestionó la intención de que se llevara el asunto en un juzgado de Violencia de Género: “Yo diría que es otra cosa y todos sabemos lo que es, ahí hay mucho amor y otras cosas de 31 años de sufrimiento y desatención por quienes teníamos que haberle atendido”.