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Noticia servida automáticamente por la Agencia EFE

Mueren 18 miembros de las fuerzas de seguridad en una ofensiva en el sur de Afganistán

EFE

Kabul —

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Al menos 11 policías y siete soldados afganos murieron hoy en una ofensiva de los talibanes en el sur de Afganistán, donde murieron cinco de ellos al atacar varios puestos de control de las fuerzas de seguridad, informó una fuente oficial.

La ofensiva comenzó esta madrugada en el distrito de Nawzad, en la provincia de Helmand, cuando el ataque de decenas de talibanes desencadenó enfrentamientos que se prolongaron durante cuatro horas, afirmó a Efe un miembro del Gobierno regional, Attaullah Afghan.

“Entre los muertos está el jefe del Departamento de Investigación Criminal” de la región, explicó Afghan, que dijo que todavía se estaban produciendo tiroteos esporádicos y que algunos de los puestos de control fueron tomados por los insurgentes.

Cinco policías resultaron heridos y los ataúdes con los fallecidos fueron trasladados a la capital provincial, Lashkarga, para ser entregados a sus familiares, añadió la fuente.

Un portavoz de los talibanes, Qari Yusuf Ahmadi, aseguró en su cuenta de Twitter que en la ofensiva sus hombres ocuparon seis puestos de control y elevó el número de “soldados” muertos a 27 y el de heridos a 11, aunque suelen exagerar la eficacia de sus acciones.

También reconoció que habían fallecido cinco insurgentes.

Los talibanes lanzaron su ofensiva de primavera el 24 de abril y desde entonces han llevado a cabo ataques en las provincias del norte de Badakhshan, Kunduz y Badghis, donde se han hecho con el control de algunas zonas, y Uruzgan, en el sur.

El aumento de los enfrentamientos se produce a pesar de que representantes del Alto Consejo para la Paz afgano, de la sociedad civil y de los talibanes se sentaron a la misma mesa el 2 y 3 de mayo en Catar en una reunión “informal”, tras la que el grupo insurgente presentó una serie de demandas para el inicio de conversaciones de paz.

El órgano conciliador se mostró abierto a negociar esas condiciones e incluso aseguró que ha comenzado a tratar con la ONU para que elimine de su “lista negra” a los talibanes que participen en el proceso de paz, tal y como pidieron los insurgentes.